Heredero de una larga estirpe de compactos deportivos que se remonta a 2002 con la llegada del Ford Focus ST170, la primera interpretación deportiva del sucesor del Escort, el nuevo Ford Focus ST 2019 que acabo de poner a prueba demuestra que los fabricantes se toman cada vez más enserio a sus modelos compactos, y que están dispuestos a todo por coronar tan codiciado segmento.

Ya con el anterior Ford Focus RS (prueba), la compañía del óvalo nos dejó muy claro que sabían cómo elevar el nivel del mercado de los compactos hasta cotas antes impensables. Un producto con un comportamiento dinámico y unas prestaciones al alcance de muy pocos. Sin embargo, en esta cuarta generación del Ford Focus (prueba), pretenden llegar un paso más allá. Con un Focus ST como el de la cuarta generación, ¿qué nos deparará el nuevo Focus RS?

Ford Focus ST 2019: la evolución de los GTI

Prueba Ford Focus ST 2019

Desarrollado íntegramente por las manos expertas de Ford Performance, el nuevo Ford Focus ST está basado en una versión optimizada de la arquitectura C2 que sirve como base para la cuarta generación del modelo. Esta evolución ha permitido integrar una configuración única de suspensión, frenos y motor en un vehículo con un marcado carácter deportivo que nace con una estética acorde a sus prestaciones y contagia su interior, donde los ingenieros de Ford han trabajado con el objetivo de crear un coche con dos facetas: un efectivo deportivo y un turismo cómodo.

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Todo comienza en el frontal, donde su nueva y prominente parrilla, con el sello ST plasmado en el extremo derecho, se conecta, mediante formas angulosas y bien definidas, a un nuevo parachoques de talla XL, descansando en su interior una toma de aire central y dos secciones terminadas en gris oscuro a cada lado con los faros antiniebla. La vista lateral evoluciona desde la base del nuevo Focus para adoptar unas nuevas taloneras y una postura de conducción más baja. Sus grandes pasos de rueda los rellena un juego de llantas de aleación de 18 y 19 pulgadas que, en la unidad de pruebas, estaban vestidas con los nuevos neumáticos Michelin Pilot Sport 4S. La zaga es la que más cambia, no solo en la versión ST, sino también con respecto a su predecesor. Adiós a sus pequeños faros para dar paso a dos unidades más horizontales, un parachoques robusto con un difusor integrado, dos salidas de escape redondas (que Ford asegura que se inspiran en las del último Focus RS) y un alerón sobre el techo que tiene el objetivo de generar carga aerodinámica sobre el tren posterior.

Prueba Ford Focus ST 2019

Es espíritu deportivo que presenta el Focus ST se ve claramente reflejado en el interior gracias a los asientos Recaro especialmente desarrollados y trabajados por los ingenieros para crear una postura de conducción óptima, donde el conductor se encuentra un volante con fondo plano, un cuadro de instrumentos nuevo y un Head-Up Display con toda la información necesaria. La pantalla táctil del sistema de infoentretenimiento tiene un tamaño de 8 pulgadas y corona una consola donde se han minimizado el número de botones físicos. El techo de color negro y las diversas tapicerías para los asientos (cuero o cuero parcial y materiales Miko Dinamica) están acompañados de un pomo para la palanca de cambios específico y una pedalera de aluminio.

El último Ford Focus RS, un espejo donde verse reflejado

Todo este aderezo de estilo deportivo no serviría de nada si el nuevo Ford Focus ST 2019 no escondiera bajo su moldeada piel una serie de atributos que le permitieran luchar de tú a tú con sus principales rivales en este segmento (Renault Mégane RS, Hyundai i30 N (prueba), SEAT León Cupra (prueba)…). Para ello, los ingenieros de Ford han echado la vista atrás y se han fijado en una de las joyas de la historia del Focus, la última versión RS.

Prueba Ford Focus ST 2019

De éste, el nuevo Focus ST toma prestado su motor, un propulsor de cuatro cilindros y 2.3 litros EcoBoost -fabricado en la planta valenciana de Ford en Almussafes-, el cual ofrece una potencia de 280 CV a 5.500 rpm y un par motor máximo de 420 Nm desde 3.000 rpm, el motor con más par del segmento (compactos turbo de tracción delantera). El bloque está asociado a un cambio manual de seis velocidades y se podrá vincular opcionalmente a una transmisión automática de siete velocidades que verá la luz durante el tercer trimestre del año.

Debido a que muchos mercados demandan una variante diésel, Ford ofrece el nuevo ST con un bloque 2.0 EcoBlue de 190 CV y 400 Nm de par, con cambio manual exclusivamente y disponible tanto para la versión de cinco puertas como para el Ford Focus ST Sportbreack 2019. Gracias a la adopción de este nuevo motor de gasolina, que deja atrás al 2.0 EcoBoost de la tercera generación, el ST es ahora un 12% más potente y tiene un 17% más de par.

Prueba Ford Focus ST 2019

Pero el potente motor de 2.3 litros, que también está disponible en el Ford Mustang EcoBoost (prueba), aunque con 290 CV, no es el único cambio que han adoptado para el ST 2019. En Ford Performance quieren que el nuevo Focus ST sea el hot hatchback más efectivo de su segmento, por lo que han implementado una serie de medidas adoptadas de sus hermanos mayores.

Potente, rápido y efectivo

La primera aplicación por parte de Ford ha sido un diferencial autoblocante electrónico (eLSD) que debuta en un coche de tracción delantera y que viene de serie en la versión con motor EcoBoost. Este elemento permite mejorar el comportamiento dinámico del nuevo ST y lo hace especialmente efectivo en cambios de adherencia o al trazar curvas sobre pavimento resbaladizo. Integra embragues activos hidráulicamente para limitar el par motor enviado a una rueda que ha reducido la tracción en la superficie de la carretera, y es capaz de redistribuir hasta el 100% del par disponible a la rueda con más tracción.

Prueba Ford Focus ST 2019

Esta respuesta es fácilmente configurable a través de los cuatro modos de conducción disponibles, por primera vez, en el nuevo Focus ST a través de un botón integrado en el volante: Resbaladizo/Mojado, Normal, Sport y Track (opcional junto al Pack Performance). Del mismo modo, Ford ha incorporado la amortiguación variable continua (CCD), que monitoriza cada 2 milisegundos la suspensión, el chasis, la dirección y las entradas de frenado para ajustar la respuesta de la amortiguación; y una suspensión trasera independiente de brazo corto y largo (SLA) para lograr el máximo rendimiento. Esta nueva suspensión es un 20% más rígida en el tren delantero, un 13% en el trasero y permite reducir la altura de conducción en 10 mm.

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Otras mejoras disponibles son una dirección asistida eléctrica (EPAS) un 15% más rápida que el Focus estándar, un Control de Par Vectorial que mejora el agarre en carretera y reduce el subviraje al aplicar fuerza de frenado en la rueda delantera interior al tomar curvas, y el Potenciador de Freno Eléctrico (EBB), una tecnología que crea una presión de frenado más rápida que un sistema hidráulico. En cuanto a sus frenos, el Ford Focus ST 2019 equipa discos delanteros de 330 mm y pinzas de doble pistón, y discos traseros de 302 mm con pinzas monopistón.

Sistemas de seguridad y asistencia

Prueba Ford Focus ST 2019

El nuevo Ford Focus ST 2019, que estará disponible en España desde 35.150 euros (Pack Performance opcional aún sin precio oficial), está disponible con una serie de sistemas de seguridad y de asistencia a la conducción que han permitido que obtenga una calificación de 5 estrellas Euro NCAP. Entre su dotación tecnológica destaca:

  • Control de Crucero Adaptativo con Stop & Go
  • Sistema de iluminación frontal adaptativo
  • Asistente de estacionamiento activo 2
  • Head-Up Display
  • Asistente de maniobra evasiva
  • SYNC 3 compatible con Apple CarPlay y Android Auto

Prueba Ford Focus ST 2019: ‘precisión’ como segundo nombre

El Ford Focus ST 2019 tiene la difícil misión de superar a sus rivales directos y convertirse en el mejor GTI del mercado. Si bien no llega a las altas esferas del segmento (de eso se encargará el futuro Focus RS), el ST se convierte en una de las opciones más interesantes a tener en cuenta por una serie de atributos que voy a detallarte a continuación.

Prueba Ford Focus ST 2019

Me dispongo a iniciar mi prueba del nuevo Focus ST. Unos asientos Recaro de corte muy deportivo, que otorgan una gran sujeción en curva, me reciben con un tacto firme que no llega a ser incómodo. El pomo de la palanca de cambios manual, ese elemento que -por desgracia- comienza a dar indicios de querer desaparecer en detrimento de los cambios automáticos, más efectivos y rápidos, y el botón de arranque a la derecha del volante, de tacto agradable y con mayor grosor, son todos los elementos que necesito para lanzarme a la carretera.

El Focus es un coche muy efectivo, preciso e incluso radical, pero que no renuncia a ponerte las cosas fáciles en tu día a día.

Lo primero que se aprecia cuando conduces el Focus ST 2019 es el trabajo que los ingenieros han realizado en la insonorización del habitáculo. El interior filtra con buenos resultados los ruidos del exterior, del motor y de la rodadura y el aire. También se vuelve un coche realmente cómodo, dadas sus características, con el que poder desempeñar tus actividades diarias. Y esto es posible gracias a los modos de conducción seleccionables desde un botón integrado en el volante. Las diferencias entre modos son acusadas, con cierta retención en Resbaladizo y Normal, mientras que da rienda suelta a todas sus pretensiones en los modos Sport y Track.

Prueba Ford Focus ST 2019

La puesta a punto dinámica del chasis, la amortiguación variable continua y la nueva suspensión trasera independiente crean una sinergia perfecta a medida que la carretera se va volviendo sinuosa. El modo en el que nuevo ST afronta, traza y sale de las curvas es el resultado de una obra magistral de ingeniería por parte de Ford Performance, un rendimiento equilibrado que ya hemos podido experimentar en otros productos de la compañía, como el nuevo Ford Fiesta ST (prueba).

El motor, del que quizás me ha faltado algo más de sonido natural y no tanto artificial (emplea el sistema ESE de mejora electrónica del sonido a través de los altavoces del equipo multimedia), estira con contundencia y determinación hasta las 6.500 rpm, con desarrollos entre marcha largos que te permiten disponer de un vehículo tranquilo y confortable a bajo régimen, y de un brutal GTI cuando la aguja pasa de las 3.000 rpm.

Prueba Ford Focus ST 2019

El tacto del pedal del freno es otro elemento que me ha llamado la atención. Sin holguras, sin complicaciones, sin recorridos vacíos. Gracias al Potenciador de Freno Electrónico, he podido probar que la frenada del Ford Focus ST 2019 es muy eficaz, con gran mordida y determinación. Pero esto te ayuda al entrar en curva, la suspensión y su chasis a trazarla, y el motor para salir con la mayor contundencia. Y bien es sabido que los motores con sobrealimentación sufren del denominado lag o turbolag, el tiempo entre pisar el acelerador y obtener la respuesta del motor.

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Para paliar los efectos negativos de la falta de carga del turbocompresor, los ingenieros han ideado la tecnología anti-lag desarrollada para el Ford GT y el Ford F-150 Raptor. Este sistema mantiene el acelerador abierto cuando el conductor levanta el pedal, aliviando la inversión del flujo de aire del turbocompresor para mantener la velocidad de la turbina y permitir que la presión de sobrealimentación aumente más rápidamente cuando sea necesario. De este modo, el motor gana mayor punch instantáneo, se vuelve más eficaz y, lo mejor de todo, es totalmente configurable a través de los modos de conducción.

Prueba Ford Focus ST 2019

Mi prueba por las carreteras de Niza, incluyendo tramos del Rallye de Montecarlo, me ha permitido descubrir porqué el Ford Focus es uno de los mejores compactos de su segmento. La cuestión no radica en cuán potente puede ser su motor, sino en lo equilibrado del conjunto chasis-propulsor, en lo bien rematado de sus materiales, su espectacular comportamiento en un tramo revirado y en cuánta tecnología puede equipar para hacer más fácil el día a día sin tener que pagar por ello una cantidad desorbitada. Quizás el tacto de la palanca de cambios, demasiado gomoso para el tipo de vehículo del que se trata, sería el único punto a mejorar en un producto de por sí, bastante redondo.

En Europa somos grandes consumidores de compactos. Amamos sus cotas reducidas, su gran comportamiento y la versatilidad de un interior para cinco ocupantes. También nos encanta su polivalencia plasmada en diferentes carrocerías y necesitamos que sea un coche con dos caras: un turismo confortable de lunes a viernes, y un GTI deportivo el fin de semana. El Focus ST logra reunir todos estos atributos, sumado a una serie de innovaciones tecnológicas que ponen en jaque a más de un rival. ¿Lo mejor de todo? El precio sigue siendo competitivo dentro de la media de su mercado. ¡Chapeau!

Prueba Ford Focus ST 2019

Ficha técnica Ford Focus ST 2019
Motor Cilindrada 2.261 cc
Cilindros 4 en línea
Potencia Máxima 280 CV / 5.500 rpm
Par Máximo 420 Nm / 3000-4000 rpm
Transmisión Caja de Cambios Manual, 6 velocidades
Tracción Delantera
Suspensión Delantera Tipo McPherson / Resorte helicoidal / Barra estabilizadora
Trasera Paralelogramo deformable /Resorte helicoidal / Barra estabilizadora
Dimensiones Longitud 4.388 mm
Anchura 1.825 mm
Altura 1.458 mm
Distancia entre Ejes 2.700  mm
Alimentación Tipo de Alimentación Inyección directa. Turbo. Intercooler
Peso Peso 1.508 kg
Prestaciones Velocidad Máxima 250 km/h
Aceleración 0-100 km/h 5,7 seg
Consumos Urbano 10,8 l/100 km
Extraurbano 6,2 l/100 km
Combinado 7,9 l/100 km
Emisiones Emisión CO2 179 g/km (EURO VI)
Precio Precio Oficial 35.150 euros

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