Durante el Salón de Nueva York 2018, que se celebra entre el 30 de marzo y el 8 de abril, la firma de Wolfburgo ha revelado ante el gran público el Volkswagen Atlas Tanoak Concept, un prototipo de pick-up mediana que, según la propia compañía, no llegará a producción. Hace ahora 18 años, el Volkswagen AAC Concept debutaba en el Salón de Detroit del año 2000 como un estudio de diseño un pick-up de nueva generación, o lo que es lo mismo, una visión prototípica de cómo serían las camionetas en el nuevo milenio que acababa de entrar.
El Volkswagen Advanced Activity Concept (AAC) combinaba las funciones de un pick-up con el lujo de un sedán de primera clase. Equipaba un sistema de tracción total y un potente motor turbodiésel V10, lo cual ya suponía un avance del rumbo al que la industria estaba a punto de virar. En cierta medida, el AAC Concept adelantó el segmento de los SUV deportivos y de lujo, aunque la revolución de los pick-up parece que ha tardado algo más en llegar.
El pick-up Volkswagen AAC Concept, un vistazo al futuro
Tan solo un año antes, la compañía alemana había presentado el Volkswagen Concept D, un estudio de diseño basado en un sedán de lujo que sentaría las bases del que acabaría siendo el Volkswagen Phaeton (2003), y su nuevo lenguaje de diseño inspiraba el frontal del Volkswagen AAC Concept. La vista lateral dejaba entrever una larga distancia entre ejes, unos pilares A muy inclinados y unas ventanillas dobles en una sola pieza.
Mientras que lo habitual en las camionetas suele ser un pilar C totalmente recto para maximizar tanto el espacio en el interior como en la zona de carga, el AAC Concept mostraba cierto grado de inclinación, acompañado de unos rieles unidos a cada lateral de la cama y en la parte superior del techo de la cabina con la tercera luz de freno integrada. La zaga presentaba un protector metálico en la parte inferior, al igual que el frontal, y un portón trasero que daba acceso a la cama, la cual estaba equipada con diferentes ganchos y una red de sujeción bajo la cual poder transportar objetos sin que estos corran el riesgo de salir despedidos.
Las puertas dobles, de apertura invertida en las posteriores, daban acceso a un interior sin pilar B de gran amplitud y con espacio para hasta cuatro ocupantes. Las puertas se desbloqueaban con un mando, el mismo que luego era necesario insertar en el cuadro de instrumentos para arrancar el motor, un detalle que llegó finalmente a producción y que estuvo presente en modelos como el Volkswagen Golf y Passat, entre otros.
El interior ofrecía materiales como Alcántara, aluminio, cuero y madera para el revestimiento del suelo. En el salpicadero se encontraban unas formas redondeadas y una pantalla a color de siete pulgadas en la parte superior de la consola central con los indicadores de inclinación que hacían eco de sus facultades todoterreno, así como funciones de navegación e indicaciones sobre los modos de conducción o la posición de la suspensión neumática. En general, el Volkswagen AAC Concept ofrecía una combinación perfecta entre materiales de lata gama para el habitáculo y unas dotes off-road que eran todo un avance en materia de diseño en una época en la que no existían los SUV de lujo, como las versiones actuales del Range Rover o el Bentley Bentayga.
Lujo y prestaciones off-road con un motor V10
El prototipo de pick-up de Volkswagen estaba impulsado por un motor diésel V10 con dos turbocompresores que le permitía entregar una potencia de 318 CV a 4.000 rpm y un par máximo de 750 Nm, el cual estaba alimentado por inyección de combustible desarrollado conjuntamente entre Volkswagen y Bosch. A éste se asociaba una caja de cambios automática de seis relaciones con modo de cambio manual Tiptronic y un sistema de tracción total.
El Volkswagen AAC Concept ofrecía dos bloqueos de diferencial seleccionables electrónicamente, así como un sistema de bloqueo de diferencial electrónico (EDS) en las cuatro ruedas, el programa de estabilidad electrónico (ESP) y una suspensión independiente neumática con tres configuraciones que permitía mejorar su desempeño fuera de la carretera. También se podía ajusta su altura en hasta 110 mm dependiendo del modo seleccionado.
En materia de diseño, el AAC Concept inspiró a la primera generación del Volkswagen Touareg (2003), el cual vería la luz tan solo tres años más tarde, aunque no serviría como base para el primer pick-up moderno de la compañía, ya que el Volkswagen Amarok no vería la luz hasta el año 2010. Sin embargo, este estudio de diseño adelantaba un concepto de vehículos que hoy en día goza de gran popularidad, el de los SUV premium.