Hemos escogido para una nueva prueba al Mitsubishi Eclipse Cross 150T 8CVT 4WD de 163 CV gasolina, un modelo muy singular que con sus 4,4 metros de longitud se sitúa entre los Mitsubishi ASX y Mitsubishi Outlander. Singular por su estética SUV con un toque de coupé, elevado grado de confort de marcha y ajustado precio. Eso sí, nada tiene que ver con el mítico Mitsubishi Eclipse -conoce su historia-, aquel deportivo de garra de los años 90. Al igual que el Puma de Ford, es otro modelo más que cambia de deportivo a SUV, lo que dice mucho de los tiempos que corren en el mundo del automóvil.
Estética
Partiendo de la plataforma del ASX, los diseñadores de Mitsubishi han creado un SUV que se aleja estéticamente de los más camperos, en particular por la caída de su trasera, que lo acerca a los que muestran líneas ligeramente cercanas a las de los coupés.
Éstas líneas exteriores han dado como resultado un interior con una amplitud que no destaca entre la competencia, aunque tiene buenos valores como la altura al techo -es decir, es perfecto para personas altas- y, gracias a que la segunda fila de asientos puede moverse hasta 20 centímetros, podemos ampliar el espacio para los pasajeros o para el maletero según necesitemos una u otra cosa. Algo realmente práctico y que otorga una capacidad de 360 a 465 litros aproximadamente, que suben hasta los 485 en las versiones de tracción a un solo eje en lugar de 4x4 como el que nos ocupa.
Por dentro
El interior ofrece una imagen de calidad, con superficies de tacto blando en la parte superior del salpicadero y buenos ajustes, aunque no es de los que más brillan en este apartado. El puesto de conducción, elevado, tiene el volante poco paralelo al conductor, y esa posición es perfecta para viajar.
El sistema multimedia se muestra mediante una pantalla de 7 pulgadas en el centro del salpicadero, y una pantalla transparente auxiliar proyecta datos frente a nosotros, como la velocidad. Pero al no contar con navegador, debemos emplear nuestro móvil para ello mediante la conexión de Apple CarPlay o Android Auto. Lo manejamos mediante un peculiar pulsador de superficie táctil en la consola central, muy japonés, y que deberás probar por ti mismo para evaluarlo, pues en primera instancia parece algo impreciso, pero estoy seguro de que en buena parte se debe a lo que estamos acostumbrados. Toyota o Lexus emplean sistemas parejos.
Motor lleno de fuerza
El motor que da vida al Mitsubishi Eclipse Cross 150T, a pesar de esta denominación, entrega 163 CV a 5.500 rpm, con un par motor de 250 Nm a 2.400 rpm. Y es que ese número en su nombre hace referencia a la cilindrada, de 1.5 litros, repartida entre cuatro cilindros y con sobrealimentación.
Se trata de un motor lleno de fuerza, nos ha sorprendido en este sentido, y por ello es capaz de mover con soltura al Eclipse aunque su peso ronde los 1.600 kilos, que no está nada mal para un SUV de su tamaño. Esta cifra se ha conseguido en buena parte gracias la utilización de aceros de alta resistencia en el 55% de la carrocería, material ligero y caro.
Las cifras de prestaciones, 200 km/h de velocidad máxima, y un paso de cero a cien en algo más de 10 segundos, no hacen justicia a la estupenda chispa de este propulsor. Eso sí, todo tiene una explicación, y es que sus consumos son un poco elevados, con una media oficial de 8,7 litros que fácilmente se convierten en 10. Así que unos consumos elevados son el precio de un motor más poderoso de lo que indica su cifra de potencia.
Esta es entregada a las cuatro ruedas mediante una caja de cambios CVT de 8 marchas. Son las delanteras las que llevan el protagonismo, y el sistema envía fuerza a las traseras mediante un embrague multidisco cuando es necesario. Y en este sentido es posible variar su acción, pues disponemos de un sistema que permite incrementar el protagonismo del eje trasero al rodar por nieve o tierra, algo que escogemos pulsando un botón, y que en el mejor de los casos puede llegar hasta al 60% del par motor para la zaga.
Prueba del Mitsubishi Eclipse Cross 150T 8CVT 4WD
La suavidad de marcha es la característica principal del rodar del Eclipse Cross gracias a una amortiguación suave, y si a esto sumamos una destacable insonorización y una posición elevada de conducción, nos encontramos con uno de los modelos más indicados para viajar y el día a día entre sus semejantes. Los desplazamientos se hacen relajados a sus mandos, y el motor colabora en buena medida a ello por dos cosas: su rápida respuesta en baja, realmente brillante, y una amplia zona media de uso que llega hasta las 5.500 rpm.
Como suele ocurrir con los coches muy confortables, el Eclipse Cross no está hecho para la conducción deportiva, y muestra amplios balanceos de la carrocería cuando conducimos agresivamente. Además, la zona alta de su motor no es tan brillante como el resto, mientras que el cambio CVT, tan suave al conducir tranquilo, se hace ruidoso y muestra el típico resbalamiento de los cambios de variador continuo.
Eso sí, cuando nos acostumbramos a sus balanceos y suavidad, nos encontraremos un coche ágil y que muestra gran aplomo en cuanto encontramos el apoyo adecuado, por ejemplo, en curvas amplias de autopista.
Por último, gracias a la tracción total variable y la altura libre al suelo podemos acometer caminos fáciles de tierra a sus mandos, aunque las llantas y neumáticos, 100% de carretera, no hacen recomendable arriesgarse mucho. Pero esto, aunque parezca poco, supone estar por encima de buena parte de su competencia.
Los rivales más destacados del Eclipse son modelos como los (prueba) Seat Ateca, (prueba) Peugeot 3008 o (prueba) Hyundai Tucson, entre los que destaca por su contenido precio. Nuestro protagonista cuanta con una lista de extras tecnológicos relativamente corta, aunque no le faltan programador de velocidad activo, frenada de emergencia o reconocimiento de órdenes mediante la voz.
A destacar | A mejorar |
Confort de marcha | Dinamismo |
Respuesta del motor | Consumos |
Precio | Pocos opcionales tecnológicos |
Mitsubishi Eclipse Cross 150T 8CVT 4WD | ||
Motor | Cilindrada | 1.499 cc |
Cilindros | 4 en línea | |
Potencia máxima | 163 CV / 5.500 rpm | |
Par máximo | 250 Nm / 2.400-4.500 rpm | |
Alimentación | Tipo | Inyección indirecta, turbo |
Transmisión | Caja de Cambios | CVT automática (variador continuo) |
Tracción | Integral | |
Suspensión | Delantera | McPherson Muelle helicoidal Barra estabilizadora |
Trasera | Doble triángulo Muelle helicoidal Barra estabilizadora |
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Frenos | Delanteros | Discos ventilados / 320 mm |
Traseros | Discos / 302 mm | |
Dimensiones | Longitud | 4.405 mm |
Anchura | 1.805 mm | |
Altura | 1.685 mm | |
Distancia entre ejes | 2.670 mm | |
Maletero | Volumen | 359-466 litros |
Peso | Peso | 1.635 kg |
Prestaciones | Velocidad máxima | 200 km/h |
Aceleración 0-100 Km/h | 10,4 segundos | |
Consumo (WLTP) |
Combinado | 8,7 l/100 km |
Velocidad baja | 10,6 l/100 km | |
Velocidad media | 8,1 l/100 km | |
Velocidad alta | 7,6 l/100 km | |
Velocidad muy alta | 9,2 l/100 km | |
Emisiones | Emisiones de CO2 | 196 g/km Euro 6 - Etiqueta C |
Precio | Precio oficial | Desde 21.950 euros |