Sí, no estamos en 28 de diciembre y tampoco es 1 de abril, el día de las inocentadas en el mundo anglosajón. Tesla ha presentado el nuevo Tesla Model S y el X. Los cambios en el exterior son leves, como puedes ver en las fotos de la galería de imágenes; no así en el interior, donde destaca el nuevo volante, que parece sacado de KITT, ‘El coche fantástico’ (Knight Rider), la mítica serie de televisión de los años 80 protagonizada por David Hasselhoff.

Como el famoso Pontiac Firebird negro carece de parte superior, recurso por el que se ha optado para que el aro no tape el pequeño y nuevo cuadro de instrumentos; seguro también para diferenciarse del resto de coches eléctricos que están llegando -ya sabemos lo que le gusta a la empresa de Elon Musk marcar la diferencia-. Por su parte, la parte inferior está achatada. Por su forma, y tras haber probado cientos de coches, puedo asegurar que realizar las maniobras de aparcamiento no será tarea sencilla. Por suerte, la compañía con sede en Palo Alto, California, ofrece un volante normal.

Asimismo, se han suprimido los satélites, por lo que ahora todas las funciones están o en el volante o en la pantalla. Una pantalla que, por cierto, es de 17 pulgadas y está colocada de forma horizontal, como estrenó el (prueba) Tesla Model 3 -recuerda que el (prueba) Tesla Model S y el (prueba) Tesla Model X la equipaban en formato vertical-.

David Hasselhoff subasta su propio Coche Fantástico

No es la primera vez que vemos un volante de estas características, pero sí en un coche de producción. Por ejemplo, el prototipo del Tesla Roadster ya lo montó en 2017. ¿Lo equipará el coche final?

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