Dicen que todo lo bueno se hace esperar. Una máxima que parece haber estado colgada en las oficinas californianas de Sillicon Valley, lugar de nacimiento de uno de los fabricantes más prometedores de este siglo, Tesla, durante el desarrollo y producción del que, a priori, es su modelo más audaz: el Tesla Model 3 que aquí probamos.

PRUEBA: Tesla Model X P100D

Un vehículo que ha sido capaz de generar tal expectación que no es descabellado pensar que muchos de los que depositaron una cuantiosa suma dinero para pre-reservarlo, hayan perdido parte de cabellera esperando poder tener en sus manos las llaves del Tesla Model 3, la berlina que iba a democratizar la electricidad.

Prueba Tesla Model 3 zaga

Tres largos años de espera que han culminado en el modelo que tenemos frente a nosotros y del que, tras una ajetreada jornada, nos ha dejado sensaciones encontradas como las que le explicamos a continuación.

Prueba del Tesla Model 3: de un vistazo… o dos

Prueba Tesla Model 3 frontal

Probar un Tesla siempre es emocionante. Ya sea por su filosofía o, simplemente, por cómo te lo entregan (al menos la unidad de prensa). Aquellos que no crean en el cambio de tendencia del sector verán como algo lúgubre y carente de estatus que tengamos que descender hasta un nivel -2 de un parking para recogerlo.

En cambio, los más optimistas verán cómo ese cambio se va materializando, no solo porque junto al Tesla Model 3 de la prueba haya aparcados otros cuatro Tesla Model S (prueba) más, todos ellos conectados a los Wallbox de la marca, sino porque unos metros más adelante observamos varias plazas con cargadores instalados (no tan potentes como los de la americana) así como otras reservadas a los carsharing eléctricos que han copado Madrid.

Prueba Tesla Model 3 detalle trasera

Tras el briefing explicativo (ojo, si eres potencial comprador te avisamos de la conveniencia de llevarse una libreta para apuntar los infinitos entresijos que esconde, principalmente su pantalla) lo desconectamos. Acción que nos permite echar una primera ojeada a sus líneas. Con el Model S a su izquierda, la primera imagen que nos surge es la de estar abriendo la puerta de un S a escala.

Sensación que se diluye una vez lo aparcamos en nuestro primer punto de foto y lo miramos con detenimiento a la luz del sol. Allí, las semejanzas con el Model S se desvanecen cual gota de agua en el mar. El frontal ya denota su propio carácter. Ya sea por la ausencia de cualquier parrilla o toma de aire, por lo redondeado de sus líneas o por lo peculiar de sus faros, pero lo cierto es que su silueta o te atrapa o, por contra, te rechina. Los pilotos traseros también destacan por su amplia superficie, mientras que los tiradores de las puertas no emergen; pero, en general, su figura recuerda, y mucho, a la de un Model S en miniatura.

Prueba Tesla Model 3 lateral

Aunque siendo justos, frente a los 4,98 metros de su hermano mayor, este Tesla Model 3 no resulta para nada compacto. No en vano, su cota de longitud se estira hasta los 4,69 metros, mientras que la anchura y la altura hacen lo propio hasta los 1,85 y 1,44 metros. Por tanto, si tuviéramos que enfrentarlo a las berlinas de combustión del momento, diríamos que es un rival directo de los actuales Audi A4, BMW Serie 3, Mercedes-Benz Clase C, Jaguar XE o Volvo XC60, por citar los más destacados.

Con todo, hay que decir que la unidad proporcionada por Tesla correspondía con la más alta de la gama actual, la Performance, en la que se añaden detalles estéticos distintivos como las llantas de 20 pulgadas, las pinzas de freno en rojo, el spoiler trasero de carbono, frenos de mayor rendimiento y una suspensión ligeramente rebajada.

Prueba del Tesla Model 3: un HAL 9000 central

Prueba Tesla Model 3 interior

Si el diseño exterior del Model 3 que probamos te ha dejado finalmente indiferente, a buen seguro que el habitáculo consigue sacarte alguna exclamación. La americana ha llevado al siguiente nivel el concepto de minimalismo. Mantiene su apuesta por una pantalla central, en disposición horizontal en lugar de en vertical, que se convierte en el ‘cerebro’ del vehículo y desde la que se manejan todas las funciones del coche.

Y cuando decimos todas, son todas. Desde las luces hasta la apertura de las puertas o maleteros, el modo de conducción, el funcionamiento del Auto Pilot, la gestión de la carga eléctrica, la radio o el Spotify (Premium), el climatizador, el navegador… Todo, incluida la navegación on-line para que el copiloto pueda leer www.periodismodelmotor.com. Con 15 pulgadas y ligeramente orientada hacia el conductor impone, sí, pero no destaca por su rapidez. Activar o desactivar un comando resulta inmediato, pero cambiar entre menús y, sobre todo, esperar a que se carguen algunos, acaba siendo eterno. Hecho que deja de sorprenderte cuando uno piensa más en ella como un ordenador que como una pantalla de un coche.

Prueba Tesla Model 3 habitáculo

Al ser el centro visual del puesto de conducción, obligará a que durante la marcha desviemos bastante la mirada. Dada la aparente inviabilidad estética de colocar un cuadro de instrumentos, no hubiera estado de más añadir un Head-up Display en el que poder visualizar la velocidad (para verla hay que mirar la esquina izquierda superior de la pantalla) o las indicaciones de navegación… vamos, lo básico.

Otro detalle, con ella se ha eliminado cualquier rastro de comando físico de la consola. Los únicos ‘supervivientes’ son los elevalunas, el bloqueo de las puertas, las ruedecitas del volante y las palancas de intermitencia o limpiaparabrisas. Un mal que no es exclusivo del Tesla Model 3 de la prueba, sino de muchos de sus rivales y que, de nuevo, obliga a desviar la mirada de la carretera. Para paliarlo, ofrece un buen sistema de reconocimiento por voz pero que aún deja fuera muchas funciones

Prueba Tesla Model 3 pantalla central

Esto nos deja un puesto de conducción limpio y amplio. A destacar el gigantesco y profundísimo túnel central, al estilo de los monovolúmenes, donde podremos depositar cualquier pertenencia. También ofrece dos tomas USB para cargar dispositivos aunque sorprende, para mal, que entre tanta modernidad no hay siquiera disponible una zona de carga inductiva.

Cómodo y amplio

La postura de conducción es cómoda, con unos asientos envolventes aunque algo rígidos y con una amplia regulación. También sobresale la calidad de los acabados, infinitamente mejor que la de sus hermanos. Quizá está un punto por detrás de sus competidores, pero ahora sí este Model 3 puede hacer alusión al término Premium

Las plazas traseras, por su parte, sí destacan pos su amplitud. Al carecer de túnel central, incluso el central irá cómodo en lo que a hueco para las rodillas se refiere. Si bien los pasajeros de las butacas exteriores notarán más ese confort del que hablamos. La pega viene en la altura, pues a causa de la ligera caída del techo, a poco que midamos más de 1,85 metros, notaremos cómo la coronilla ya roza.

Un poco más atrás, los 340 litros de maletero se quedan ligeramente por detrás de la terna alemana (480 para los A4 y Serie 3 y 455 para el Clase C), aunque ofrece un hueco muy regular, un doble fondo profundo para dejar los cables y cargadores y, sobre todo, una boca muy amplia que facilita la carga de objetos. Para competir contra dicha trinidad, este Tesla Model 3 se saca un as de la manga en forma de baúl delantero. Más reducido, sus 85 litros son perfectos para depositar mochilas o bultos de tamaño medio, los cuales, pueden sujetarse gracias a los ganchos superiores.

¡A correr!

Ya hemos comentado que de las tres versiones disponibles que actualmente se comercializan en nuestro país, Tesla nos cedió la más potente, prestacional y cara: el Model 3 Performance. Además de las comentadas variaciones estéticas, la gran diferencia es la mejora de potencia, y por tanto de rendimiento, registrada.

Con 462 CV de potencia conjunta, los dos motores (uno en cada eje) catapultan al Tesla Model 3 que pruebo de manera endiablada. Cierto es que sobre el papel registra esos 3,4 segundos en el 0 a 100 km/h, pero lo que realmente nos ha parecido excelente es la capacidad de aceleración que registra en movimiento. Basta hundir ligeramente el pie derecho en el pedal para fusionar nuestra espalda con el asiento, pulverizando cualquier registro de recuperación.

Empuje que consigue, además, sin modo Ludicrous alguno y que le permite mirar de tú a tú sin avergonzarse a los pata negra de cada berlina, es decir, los RS4, M3 o AMG C63 por volver a citar a los más vendidos. Si bien su salida es más fulgurante con el modo deportivo, cuando circulamos con el Relax, también notaremos más viveza a la hora de querer afrontar un adelantamiento. Con todo, decir que la velocidad máxima de este Model 3 llega a los 261 km/h.

¡A girar!

Prueba Tesla Model 3 exterior curva trasera

Comprobada dicha capacidad en línea recta, toca entrar en un tramo por curvas para ver si, de verdad, merece competir contra los tres gallos antes descritos. Dicho y hecho. Tras dos curvas bien pronunciadas, ponemos los warning y paramos. Mi compañero me pregunta si todo bien a lo que se responde él mismo al ver mi cara de sorpresa. “¡Bravo!” es la única palabra que consigue salir de mi boca.

Sí, este Model 3 lo ha conseguido. Seguimos la ruta para cerciorarnos de que no ha sido fruto de la casualidad y seguimos enlazando giros. Sencillo, fácil, seguro. Ahora sí que da gusto conducir un Tesla. Dinámicamente le da mil vueltas a sus hermanos. En modo Deportivo, la dirección se nota precisa y directa, guiándonos por donde queremos (en Comfort la asistencia es desmesurada). La estabilidad es excelente lo que permite un paso por curva más ágil de lo que a priori se piensa.

Prueba Tesla Model 3 trasera

Porque el Model 3 no deja de ser un coche eléctrico con un lastre considerable a causa de sus baterías. Sin embargo, al estar colocadas bajo el piso, le proporcionan un centro de gravedad bajísimo aumentando así la comentada agilidad. La suspensión, más dura y ligeramente rebajada, trabaja a las mil maravillas evitando cualquier tipo de balanceo. No esconde su carácter subvirador cuando rozamos el límite, pero gracias a la tracción total todo acaba yendo por donde debe. Por último, los frenos también realizan un trabajo exquisito, más aún si tenemos en cuenta que deben detener un conjunto que roza las dos toneladas de peso.

Vídeo: el Tesla Model 3 estrena ‘Track Mode’

Como guiño a su apellido Performance, este Model 3 también suma el modo Track, destinado a dar rienda suelta a sus prestaciones y bondades dentro de circuito. Cuando lo probemos una segunda vez y con un poco más de tiempo, intentaremos meterlo en trazado y hablar un poco más de él.

¡A enchufar!

Prueba Tesla Model 3 toma carga

Dado que la jornada de prueba fue cuanto menos intensa, pocas conclusiones se pueden sacar de la energía gastada. Recogido con poco menos de 500 kilómetros, lo devolvimos a media tarde con una autonomía restante del 40% que en distancia se tradujo en algo más de 200 kilómetros. Como decimos, no es un dato representativo, pues muchas de las horas destinadas fueron para realizar el reportaje fotográfico.

Ahora bien, sí hay que recalcar que este Tesla Model 3 no ofrece un gasto demasiado elevado, con una media de unos 18 kWh/100 km durante el día y sin hacer mucho caso del mismo, se pueden obtener muy buenas cifras. Las que homologa la marca corresponden a un recorrido de 530 km entre cargas agotando los 75 kW de batería, permitiéndonos llegar a muchos puntos de nuestra Península sin parar. Para confirmarlo, se puede hacer uso del navegador del vehículo en el que se incluyen todos los cargadores públicos así como los 26 Supercargadores.

En lo que respecta a tiempo, conectándolo a unos de estos, se tardan unos 20 minutos en tener disponibles 250 km, mientras que en una toma rápida, de 7 kW, se obtienen unos 60 kilómetros por hora.

Haciendo números

Como punto final, toca, claro está, hablar del precio. A efectos prácticos, nuestra unidad Performance suponen un sobrecoste de 10.900 € frente a la versión Long Range, que parte de los 57.600 €, recordemos que con 100 CV menos y menos rendimiento pero con 30 km más de autonomía. ¿Mercede la pena? La respuesta, como en los modelos de combustión, es una cuestión de gustos.

Es aquí cuando nos surge la gran duda, ¿No iba este Model 3 a democratizar la electrificación?, a la que sigue otra no menos importante: ¿dónde están esos 35.000 $ (30.970 € al cambio) que el Sr. Musk anunció en un principio? Respondiendo por el final, de momento, para España, esa tarifa de derribo para haberse esfumado. Cierto es que acaba de llegar la versión de acceso, Estándar Plus, cuya tarifa parte de unos 48.200 € que se hallan muy lejos de los 39.500 $ de la tarifa norteamericana.

Por último, en lo que a democratización se refiere, seamos honestos. Con esa diferencia de precio, los 35.000 $ acabarían por convertirse en España en más de 40.000 €, lo que dificulta el acceso para la mayoría de usuarios, quienes, por ese precio quizá prefieran optar por un A4 40 TDI o 40 TFSI (de 190 CV) o por el nuevo Serie 3 330i. Ninguno llega a los 462 CV y, ni mucho menos, es tan brutal acelerando, pero su punto a favor es que en el momento en el que salte la reserva, en menos de tres minutos habrán repostado por completo y podrá recorrer otros 600 kilómetros sin preocuparse por nada.

Conclusión tras la prueba del Tesla Model 3 Performance

El cuento de nunca acabar. Con cada eléctrico uno se vuelve loco con la rentabilidad y los números. Intentando dejarlos a un lado, hay que reconocer que este Model 3 da un paso de gigante al frente. Con un diseño exterior y un habitáculo peculiares, se postula como el menos Tesla de los Tesla comercializados hasta ahora. Llamativo, futurista, minimalista y, sobre todo, divertido (muy) de conducir, es una opción más que recomendable para iniciar el cambio de tercio… siempre y cuando no tenga miedo a hipotecarse para pagarlo o, claro está, se lo pueda permitir sin preocuparse.

A destacar

A mejorar

Aceleración y empuje

Ausencia de botones físicos

Diseño minimalista

Maletero trasero pequeño

Comodidad plazas traseras

Precio de la gama

Ficha técnica Tesla Model 3 Performance

Motor

Tipo

Eléctrico

Motor

Dual

Potencia máxima

462 CV

Par máximo

639 Nm

Transmisión

Caja de cambios

Automática, 1 velocidad

Tracción

Total

Suspensión

Delantera

Paralelogramo deformable, resorte helicoidal

Trasera

Paralelogramo deformable, resorte helicoidal

Dimensiones

Longitud

4.694 mm

Anchura

1.849 mm

Altura

1.443 mm

Distancia entre ejes

2.875 mm

Alimentación

Batería

Li-ion 75 kWh

Peso

Peso

1.935 kg

Prestaciones

Velocidad máxima

261 km/h

Aceleración 0-100 km/h

3,4 seg

Consumos

Urbano

-,- l/100 km

Extraurbano

-,- l/100 km

Combinado

-,- l/100 km

Emisiones

Emisión CO2

0 g/km

Precio

Precio final

68.500 euros

 

Valoración
Diseño
7
Acabados
7,5
Habitabilidad
8,5
Maletero
6,5
Motor
9,5
Consumo
8
Comodidad de marcha
8
Comportamiento
9,5
Equipamiento
7,5
Precio
7
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Karam el Shenawy
Enamorado del motor y de todo lo que le rodea. La fortuna y las vicisitudes de la vida me permitieron trabajar en mi gran pasión. Cada coche, al igual que cada día, es una oportunidad de aprender un poco más.
prueba-tesla-model-3-performanceEl Tesla Model 3 es una berlina media eléctrica, con una autonomía de entre 415 y 560 km, una habitabilidad trasera muy notable, un maletero de 340 litros y un comportamiento perfectamente equilibrado entre confort y deportividad.

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