Ya han pasado algunos meses desde que se habló por primera vez del proyecto Porsche K1. Bajo este nombre en clave se esconde un SUV eléctrico que tendrá al menos 650 CV de potencia y una apariencia atípica. Según Auto Motor und Sport, el nuevo modelo no solo será el vehículo más grande jamás fabricado por Porsche, sino que también ofrecerá una serie de características que lo harán realmente único para la marca.
Situado en la gama de productos de la compañía por encima del Porsche Cayenne (prueba), el Porsche K1 estará basado en la plataforma SSP del Grupo Volkswagen, su arquitectura eléctrica más avanzada. Ofrece tecnología de 900 voltios que permite tiempos de recarga de solo 15 minutos para obtener el 80% del nivel de la batería.
Se espera también que cuente con un paquete de baterías de más de 100 kWh de capacidad energética, una unidad que será lo suficientemente eficiente como para superar los 700 kilómetros de autonomía homologada entre carga y carga.
El SUV eléctrico que Porsche está preparando tendrá al menos 650 CV
De igual modo, sirve como base para un sistema de propulsión eléctrico compuesto por dos motores capaces de generar 650 CV de potencia continua, aunque también tendrá un pico de alrededor de 1.000 CV. Sus motores síncronos de excitación permanente (PSM) cuentan con refrigeración de aceite para aumentar la potencia constante.
8 motores de seis cilindros que ponen en un aprieto a muchos V8
El informe de la publicación alemana también sugiere que los motores estarán conectados a cajas de cambio de una sola velocidad y diferenciales de bloque mecánico. También contará con una suspensión neumática ajustable para elevar su altura lo suficiente como para desenvolverse con soltura en terrenos complicados. Si bien no llegará al nivel de modelos como el Mercedes Clase G (prueba), será lo suficientemente bueno como para competir con el Mercedes EQS SUV y el BMW iX (prueba).
En lo que respecta a su diseño, el Porsche K1 ha sido descrito por Oliver Blume, CEO de la compañía, como “una interpretación muy deportiva de un SUV”. Auto Motor und Sport informó de que Porsche mostró un boceto inicial del SUV eléctrico a los concesionarios estadounidenses, y que éstos lo describieron como un vehículo con un capó corto, un parabrisas empinado, una línea de techo inclinada y un diseño trasero plano. Se dice que tiene un diseño “mitad sedán, mitad crossover”.
La llegada del Porsche K1 (cuyo nombre comercial aún no se conoce) está prevista, al menos, para el año 2027 y será el último SUV eléctrico que la compañía lanzará antes de que finalice la presente década, después de los Macan y Cayenne eléctricos, previstos para 2024 y 2026, respectivamente.