Las carreras de aceleración son una atracción muy entretenida de presenciar. Especialmente cuando los vehículos implicados son coches de carreras tan variopintos como los que protagonizan el vídeo que acompaña a este artículo. Y es que, en un capítulo especial para Nochebuena, Top Gear enfrentó a un WRC, un Fórmula 1 y un Fórmula E en una drag race.
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Empezando por el World Rallye Car, hablamos de un Ford Fiesta WRC de M-Sport. El vehículo está equipado con un motor de 1.6 litros sobrealimentado que desarrolla 380 CV de potencia, gestionados por un cambio secuencial de seis velocidades. La potencia se envía a un sistema de tracción integral con la ayuda de diferenciales mecánicos delanteros y traseros, más un diferencial central activo. Este es el único vehículo participante sin ningún tipo de electrificación.
Top Gear enfrenta a un WRC, un Fórmula 1 y un Fórmula E en una drag race
El siguiente en la línea de salida es el Mercedes-AMG F1 W10 EQ Power+ de 2019 con el que Lewis Hamilton logró su sexto título de Fórmula 1. Este monoplaza cuenta con algunas piezas adicionales del Mercedes-AMG F1 W11 EQ Performance de 2020 y una decoración negra más reciente. Equipa el V6 sobrealimentado de 1.6 litros combinado con un motor eléctrico para generar 1.000 CV de potencia. Pesa solo 743 kilos y cuenta con un cambio secuencial de ocho velocidades conectado al tren trasero.
Por último, el DS E-Tense FE21 del Campeonato de Fórmula E de este año. El monoplaza eléctrico cuenta con una pareja de motores eléctricos de 340 CV de potencia conectados a las ruedas traseras. La energía proviene de una batería de 54 kWh y tiene un peso de 903 kilos. Además, puede pasar de 0 a 100 km/h en 2,8 segundos.
Para mayor espectáculo, la pista de aceleración está completamente mojada por la lluvia. No te pierdas esta interesante carrera (vídeo en inglés).