Corría el año 2008 cuando Nissan reinventaba el concepto de los todocamino con el Qashqai. Solo dos años más tarde decidía liarse la manta a la cabeza y lanzar un SUV de pequeño tamaño con un diseño muy particular, el Juke. Una década después, y tras quedarse a las puertas de alcanzar el millón de unidades vendidas en todo el mundo -el 10% se ha logrado en España-, llega la segunda generación, que es la que pongo a prueba: el Nissan Juke 2020 1.0 117 CV DTC7.
Siempre me gusta ser sincero, más aún con la gente que me rodea. Tú, ahora mismo, estás a menos de medio metro de la pantalla, así que también entras en el grupo; eres de la familia: el diseño del primer Juke no me gusta. Puede que sea gracioso, sí, pero no es de esos coches que cuando lo aparcas te invita a girar la cabeza para echarle un último vistazo, y eso dice mucho de un coche. También es cierto que en este segmento, el de los B-SUV, tienes que salirte de la tónica para comerte un trozo de la tarta.
Ahora llega la segunda generación con la misma fórmula, pero con un diseño, para mi gusto, muy, muy atractivo con el que mantener el tipo e, incluso, poder ganar al nutrido número de contrincantes que copan el segmento y que ha crecido exponencialmente en estos últimos cinco años. De hecho, es el segmento que más crece y el que tiene unas previsiones más altas de seguir haciéndolo.
Exteriormente llama mucho la atención, y gran parte de culpa la tienen sus faros delanteros divididos en dos alturas, los inferiores circulares y ahora con forma de Y; la gran parrilla V-Motion, el techo flotante, las enormes llantas de aleación de 19 pulgadas y el color Fuji Sunset que estrena y que puedes ver en las imágenes de la prueba.
Dentro, el salto de calidad que ha dado es destacado. Tiene muy buen aspecto gracias, entre otros elementos, a la Alcantara, material que se encarga de tapizar la zona media del salpicadero. Por su parte, la superior equipa plásticos acolchados; buen detalle, aunque la inferior y los paneles de las puertas adoptan plásticos duros, algo de lo más normal en la categoría. Incorpora un volante tapizado en piel que está achatado en la parte inferior y que desprende solidez -como también lo hacen sus botones-.
La consola central porta un diseño muy moderno tipo turbina, singularidad que se incrementa gracias a las toberas del sistema de climatización. Un hecho que me gustaría destacar es que las funciones básicas como apagar o encender la radio o el climatizador, subir o bajar el volumen o la temperatura tienen botones físicos. Quizá no debería ni mencionarlo, pero dada la corriente minimalista que impera en los fabricantes y que es aún más acusada en los todocamino compactos... Dejo que me llames señor mayor, recuerda que hay confianza. Además, no comparten funciones, como la anterior generación, que era un sinsentido. Asimismo, se nota que Nissan ha cuidado muchos detalles, como puedo comprobar en el tapizado de la consola del túnel de transmisión, que es de piel vuelta, o el tramado que imita la fibra de carbono de la moldura que rodea al botón de encendido.
Continúo la prueba del Nissan Juke DIG-T 1.0 117 CV DTC7 desplazándome a la segunda fila. Sí, efectivamente las cotas interiores han crecido. Según la marca japonesa, son 5,8 cm los que se ha ganado de espacio para las rodillas y 1,1 cm para la cabeza. Es algo que corroboro, porque mis piernas gozan de un espacio realmente amplio y son dos dedos los que separan a mi cabeza de rozar con el techo -ten en cuenta la caída de éste-. Dada la anchura del vehículo, obviamente la plaza central es para un apuro, aunque el túnel de transmisión bajo pone las cosas más sencillas.
Otro de los espacios que ha crecido es el maletero, que ha pasado de tener 354 a 422 litros, siendo una de las mejores opciones del segmento. Además, tiene formas regulares, una amplia boca de carga, ganchos para colgar objetos y una bandeja que se puede colocar a dos alturas. Lástima que la banqueta posterior no sea corrediza.
Otra vez vuelvo a mi sitio, al puesto de conducción. No puedo dejar de mirar sus impresionantes asientos con forma de bacquet. Me parece mentira que pertenezcan a un coche de este tipo, pero, sobre todo, de este tamaño. Y no lo digo porque sus reposacabezas tengan integrado unos altavoces Bose UltraNearfield, que también, ni porque estén tapizados en piel y Alcantara, sino por la sensación de solidez que transmiten. Además, cumplen el cometido real de un asiento: son cómodos y sus apoyos sujetan bien el cuerpo en curva.
Para la prueba he optado por el Nissan Juke DIG-T 1.0 117 CV con cambio automático. Esta motorización es la única disponible en la gama. Su funcionamiento me parece muy correcto, suficiente para mover el coche sin apuros. Por lo que sí optaría sería por la transmisión manual, puesto que este DTC7 no me ha parecido la mejor elección para asociarlo al motor de tres cilindros. Me ha dado la sensación de ser bastante lento -más al subir que al bajar de marcha- y poco preciso para tratarse de una transmisión de doble embrague. Además, independientemente del modo de conducción escogido, te brinda tirones, tanto al iniciar la marcha como en marcha, en el momento en que cambia de transición, haciendo que tu cuerpo sufra un movimiento longitudinal, parecido a la reverencia que se hace a un rey. Lo bueno es que tienes levas tras el volante para decidir cuándo cambiar; lo malo es que no se puede hacer desde la palanca del cambio, algo que para mí no es ningún problema. Además de ser 1.400 euros más caro, el consumo medio de combustible oficial es mayor en el 1.0 117 CV automático que en el manual. Durante la prueba, el consumo del Nissan Juke ha sido de 6,4 l/100 km, una cifra buena y bastante cercana a la dada por el fabricante: 6,1 l/100 km.
Respecto al motor tricilíndrico, tiene un sonido bonito, nada feo, y no vibra en exceso para estar compuesto por tres cilindros. Desde el cuadro de instrumentos, que tiene una pantalla digital bastante grande entre las dos esferas analógicas, observo cómo a partir de las 1.800 rpm se nota un mayor empuje. Esto es debido a la 'Over Torque', que es la función que se encarga de entregar el par máximo, 200 Nm, durante 25 segundos cuando hundo el pedal derecho en segunda marcha o alguna superior a ella. Asimismo, cuento a mi disposición con tres modos de conducción, Sport, Normal y Eco, con los que la entrega de energía se realiza de forma diferente.
El tacto de la dirección me gusta, ha mejorado, como también lo ha hecho la suspensión, que ahora es más cómoda, aunque, eso sí, mantiene bastante firme la carrocería durante los virajes.
https://youtu.be/_N_E9Xh2P3w
Finalizo la prueba dinámica del Nissan Juke DIG-T 1.0 117 CV DTC7. 21 400 euros es el precio de este SUV con cambio manual y 22.800 con transmisión automática. Existen opciones más económicas en el mercado -también más caras-, pero ninguna tan pintona como ésta con el acabado Tekna (24.550 euros) o N-Design (21.500 euros).
Aparco, y cuando me alejo, me giro para verlo; eso dice mucho de un coche...
Ficha técnica Nissan Juke DIG-T 1.0 117 CV DTC7 | ||
Motor | Cilindrada | 999 cc |
Cilindros | 3 en línea | |
Potencia máxima conjunta | 117 CV / 5.250 rpm | |
Par máximo | 200 Nm / 1.750 - 3.750 rpm | |
Alimentación | Tipo | Inyección directa. Turbo |
Transmisión | Caja de Cambios | Automático, 7 velocidades Doble embrague |
Tracción | Delantera | |
Suspensión | Delantera | Tipo McPherson Resorte helicoidal Barra estabilizadora |
Trasera | Rueda tirada con elemento torsional | |
Frenos | Delanteros | Discos de freno ventilados 280 mm |
Traseros | Tambor | |
Dimensiones | Longitud | 4.210 mm |
Anchura | 1.800 mm | |
Altura | 1.595 mm | |
Distancia entre ejes | 2.636 mm | |
Maletero | Capacidad | 422 litros |
Peso | Peso | 1.207 kg |
Prestaciones | Velocidad máxima | 180 km/h |
Aceleración 0-100 Km/h | 11,1 seg | |
Consumo WLTP | Combinado | 6,1 l/100 km |
Velocidad baja | 7,5 l/100 km | |
Velocidad media | 5,7 l/100 km | |
Velocidad alta | 5,1 l/100 km | |
Velocidad muy alta | 6,6 l/100 km | |
Emisiones | Emisiones de CO2 | 138 g/km - Euro 6 |
Precio | Precio oficial | Desde 22.800 euros |