PRUEBA: Ford Fiesta 2017 Titanium 1.0 Ecoboost 125 CV

Hace cuatro años tuve la ocasión de probar el Ford Fiesta 1.0 Ecoboost 2013. Por aquel entonces, algo más joven y con menos canas, el que te habla escribe cayó rendido a sus múltiples encantos, motivo por el cual pasó a ocupar un hueco en mi garaje. Por suerte, porque mi profesión me lo permite, tengo la oportunidad de meter mano al nuevo juguete de la compañía norteamericana para ver su evolución y su posicionamiento respecto a sus feroces y múltiples rivales; un juguete que con su motor de 999 cc y sus 125 CV hacen de este pequeño un gran coche.

prueba Ford Fiesta 2017 Titanium 1.0 Ecoboost 125 CV

Como suele ocurrir, salvo susto inexplicable, que como las meigas, haberlos haylos, la generación posterior ha sido proyectada para mejorar la previa, corregir las debilidades y explotar aún más las fortalezas. Asimismo, podríamos contar con los dedos de la mano los modelos que siguen vivos y que han aguantado en el mercado más de cuatro décadas. El Ford Fiesta es uno de esos cuarentones que forma parte de este longevo grupo.

Ahora, tras el lanzamiento, la presentación y poder constatar su fiabilidad en las 24 Horas más solidarias, me toca probar el Ford Fiesta 2017 Titanium con el motor 1.0 Ecoboost de 125 CV.

PRUEBA: Ford Fiesta ST200

Por fuera exhibe un diseño exterior muy atrevido y fresco. La firma ha dado en el clavo, algo imprescindible tras los últimos rivales que han llegado, más o menos al mismo tiempo, y que también portan con orgullo sus atractivos trazos: el Volkswagen Polo o el SEAT Ibiza (prueba del 1.5 TFSI 150 CV FR) son solo dos ejemplos. En la parte frontal, su mirada, donde el LED que rodea el faro es el auténtico protagonista, está acompañada de unas luces antiniebla en posición vertical, como Fiesta Titanium que es, aunque me satisface más la disposición horizontal de los acabados ST_Line o el Vignale, puesto que marida mejor con el paragolpes delantero (aquí puedes ver las diferencias). Lo mismo ocurre con la parrilla, de lamas horizontales cromadas, sustituidas por otras formas geométricas en el resto de acabados. En lo que respecta a la zaga, los pilotos, en lugar de ser verticales como en la generación anterior, son horizontales, dando más anchura, más presencia. Redondea el conjunto sus llantas de aleación de 17 pulgadas (200 €), que en el eje posterior dejan ver los frenos de disco, que es novedad en el Fiesta.

Faros LED Ford Fiesta 2017 Titanium

Pero sin lugar a dudas, donde se ha experimentado el mayor cambio ha sido en el interior. El conjunto de sus elementos da una percepción de calidad alta: la botonera utilizada, la pantalla tipo tablet del sistema de infoentretenimiento, que puede ser de hasta 8 pulgadas, y el cuadro de instrumentos, compuesto por una pantalla a color que recoge toda la información y un panel negro que se ilumina, recurso utilizado por marcas premium como BMW o Land Rover, son los componentes más destacados. A ellos se suma las molduras en negro piano de parte del salpicadero y los plásticos gomosos de la zona superior de éste. Eso sí, mantiene los duros de la guantera y de los paneles de las puertas, algo habitual, independientemente de la marca, en este segmento. También se han reorganizado los botones, suprimiendo muchos de ellos. Esta nueva distribución era algo que esperábamos, algo lógico tras la macedonia que tenía la generación previa. Lo bueno es que Ford no ha prescindido de los habituales, algo que resulta coherente, pero que muchos fabricantes han decidido saltárselo a la torera y seguir la tendencia del minimalismo elevada a la enésima, y no práctica, potencia.

interior Ford Fiesta 2017 Titanium

Antes de conocer las plazas traseras creo que es de buena educación que te informe de que casi todas sus cotas se han visto ampliadas. Tiene una longitud de 4.040 mm (3.969 mm el anterior), una anchura de 1.735 mm (1.722 mm) y una batalla de 2.493 mm (2.489 mm), por tanto debería encontrarme mayor espacio a bordo; lo único que ha menguado es su altura, que ha pasado de 1.495 mm a 1.476. Ahora sí. Me acomodo en las banquetas traseras, que mantienen el llamativo patrón de las delanteras y que parcialmente están revestidas en piel (600 €). No percibo mayor hueco para las piernas; el que hay es destacado. Tampoco para la cabeza, que es justo, pero porque mi unidad de pruebas equipa techo panorámico practicable, que da más luminosidad, acrecentando la sensación de amplitud a cambio de restar espacio. Por su parte, el destinado a los hombros es reducido si viajan tres personas, nada fuera de lo común entre los utilitarios, aunque tampoco entre los compactos, SUV e incluso berlinas de mayor tamaño.

Otra ventaja del nuevo modelo es su maletero, que ha crecido 13 litros para sumar 303, ampliables a 984 si se abaten los respaldos de los asientos traseros. Tiene una forma cuadrada, la boca de carga es baja y monta un doble fondo cuyo piso oculta el kit reparapinchazos -de forma opcional y gratuita se puede instalar una rueda de repuesto, algo que recomiendo-.

Maletero Ford Fiesta 2017

Si su interior es uno de los reclamos del coche, el otro es su galardonado motor. La unidad de pruebas del Ford Fiesta 2017 equipa el 1.0 Ecoboost de 125 CV, el pequeño bloque que me sorprendió gratamente hace unos años por su excelente respuesta. Ha recibido modificaciones, como las de la culata o las de la gestión electrónica, para mejorar el consumo -ahora el medio oficial se sitúa en 4,3, cifra que dista de los 5,6 l/100 km obtenidos-, pero también para ofrecer desde parado una capacidad más sosegada a bajo régimen. Sigue siendo poderoso cuando supera las 2.000 rpm, donde se aprecia la entrada del turbo, percepción que se diluye si optamos por el modo ‘Eco’, novedad con la que se consigue mejores consumos gracias a una entrega de fuerza mucho más progresiva. Sigue estirando a las mil maravillas y es rápido, muy rápido. Sobre el papel, ahora es 0,5 segundos más lento en el 0 a 100 km/h, pero te aseguro que no lo notarás abordo. Además, me parece más refinado, silencioso, o por lo menos está mejor insonorizado. También, que vibra bastante menos, aunque como tricilíndrico que es hace temblar levemente, y no de miedo, la carrocería. Puede trabajar asociado a un cambio automático de doble embrague o a uno manual de seis velocidades, otra novedad, puesto que solo había disponible uno de cinco y que en esta generación se ha dejado únicamente para los motores atmosféricos (1.1 Ti-VCT de 71 y 86 CV). La transmisión es tan rápida y precisa como la anterior, pero su tacto me resulta menos agradable. No sé, cuestiones de gusto, supongo.

prueba Ford Fiesta 2017 Titanium 1.0 Ecoboost 125 CV

Monta la misma plataforma que el Fiesta de 2013, pero eso no es ningún problema porque sigue siendo ágil en curva: realiza los cambios de apoyo con celeridad. Los balanceos son escasos, a pesar de que su suspensión filtra muy bien las irregularidades de la calzada, cosa que se agradece. Como también agradezco que la zaga sea un poquito menos viva, hecho que no le quita ni un ápice de diversión al volante. Asimismo, la dirección casa a la perfección con el conjunto por su rapidez, comunicación y buena precisión, y los frenos hacen su trabajo de forma más que satisfactoria.

Como no podía ser de otra forma, siendo un producto destinado principalmente para la gente joven, trae numerosos sistemas de conectividad con el Ford SYNC 3, que permite utilizar AppLink, Apple CarPlay y Android Auto de forma rápida y desde una interfaz muy intuitiva. Asimismo, el nuevo Ford Fiesta puede equipar los sistemas más avanzados, muchos de ellos solo disponibles en segmentos superiores como la detección de peatones, alerta de tráfico cruzado, control de crucero adaptativo o aparcamiento automático gracias a sus dos cámaras, tres radares y 12 sensores ultrasónicos. También están disponibles el de reconocimiento de señales de tráfico, las luces largas automáticas, el indicador de distancia, apertura y arranque sin llave, cámara trasera, aviso de colisión frontal, alerta al conductor por cansancio, de mantenimiento de carril y por vehículo en el ángulo muerto.

prueba nuevo Ford Fiesta 2017 Titanium 1.0 Ecoboost 125 CV

El precio del Ford Fiesta 2017 de la prueba -acabado Titanium y motor 1.0 de 125 CV- parte de 16.495 euros, una cantidad que se sitúa en la media si lo comparamos con sus rivales. Desembolsando este dinero serás el propietario de un coche divertido, rápido y cómodo. No olvides que si tu talonario te lo permite puedes equiparlo con los últimos sistemas de conectividad y seguridad.

prueba Ford Fiesta 2017 Ecoboost 125 CV

A destacar A mejorar
Respuesta el motor Sonido del motor
Percepción alta calidad interior Acabados Vignale y Titanium sin opción tres puertas
Comportamiento dinámico Más lento en el 0 a 100 km/h

Ficha Técnica Ford Fiesta 2017 Titanium 1.0 Ecoboost 125 CV
Motor Cilindrada 999 cc
Cilindros 3 en línea
Potencia máxima 125 CV /6.000 rpm
Par máximo 170 Nm /1.400-4.500 rpm
Transmisión Caja de cambios Manual; 6 velocidades
Tracción Delantera
Suspensión Delantera Tipo McPherson, resorte helicoidal, barra estabilizadora
Trasera Rueda tirada con elemento torsional, resorte helicoidal
Dimensiones Longitud 4.040 mm
Anchura 1.735 mm
Altura 1.476 mm
Distancia entre ejes 2.493 mm
Alimentación Tipo de alimentación Inyección directa, turbo
Peso Peso 1.164 kg
Prestaciones Velocidad máxima 195 km/h
Aceleración 0-100 km/h 9,9 seg
Consumos Urbano 5,4
Extraurbano 3,6
Combinado 4,3
Emisiones Emisión CO2 98 g/km
Precio Precio oficial 16.495 euros

Fotos: Álex Aguilar

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor, introduce tu comentario
Por favor ingrese su nombre aquí

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.