Ponemos a prueba el Alfa Romeo Giulia Veloce en su versión con motor turbodiésel 2.2 JTD de 210 CV. Una berlina que te apasionará por su comportamiento, enamorará con su diseño y te convencerá gracias a la excelente relación que ofrece entre prestaciones y gasto contenido de combustible. Un vehículo que además es cómodo y apto para todas las estaciones del año, pues está equipado de serie con un cambio automático de ocho velocidades y con un sistema de tracción a las cuatro ruedas Q4.
Vídeo: el Alfa Romeo Giulia GTA explicado por sus creadores
Este atractivo Giulia Veloce de color ‘Rojo Alfa’ que puedes ver en las fotografías que ilustran la prueba está basado en la última evolución del sedán italiano. Un coche, el Giulia, que recordemos fue lanzado al mercado en 2016 y que desde entonces, ha recibido una serie de mejoras. La última de las actualizaciones llegó en 2020 y permanece vigente, con cambios que afectaron a aspectos como el sistema multimedia, los asistentes de conducción o detalles de acabado del habitáculo de este Alfa Romeo.
Una berlina increíblemente bella

La historia de Alfa Romeo está plagada de éxitos en numerosos ámbitos. Pero si solo pudiese destacar un aspecto de la firma con sede en Turín, ese sería sin duda la increíble habilidad que tiene para crear coches con una innegable belleza. Sus automóviles siempre están presentes en cualquier lista que recopile los coches más bonitos de la historia. Y no es de extrañar sabiendo que son autores de vehículos clásicos excepcionalmente atractivos como el 8C Lungo Spider de 1939; o contemporáneos, como el imponente Alfa Romeo 8C Spider (prueba).
El que hoy nos ocupa no es una excepción, al contrario, es un claro representante del buen hacer de los diseñadores de Alfa. Personalmente considero que el Giulia es la berlina más atractiva del mercado desde el mismo momento que salió a la venta. Y no debo de ser el único, porque todavía no he encontrado a nadie que no encuentre el encanto del protagonista de la prueba, el Alfa Romeo Giulia Veloce. Todos coincidimos en que es un coche especialmente bonito gracias a sus equilibradas proporciones y atractivas líneas.

La gama del sedán está estructurada de forma que pueda satisfacer a los clientes que prefieran un coche más elegante o deportivo, además del que busque un coche competitivo con la terminación de acceso denominada Super. Para los que busquen lujo están la variante Ti (siglas de ‘Turismo Internazionale’), que luce un interior con detalles de madera y tapizados de piel de alta calidad que cubre prácticamente todas las superficies. Por fuera estos Ti se distinguen gracias a las llantas específicas de 19”, a los marcos cromados de las ventanillas o gracias a los logos identificativos visibles en las aletas delanteras.
El Giulia Veloce, al igual que el Sprint o Sprint Plus (que son más económicos al estar disponible con motorizaciones menos potentes), apuesta por la deportividad. El Veloce viene equipado de serie con unas llantas de aleación de 19 pulgadas -las unidad de las fotos tienen el acabado Oscuro opcional, que cuesta 545 euros-, detalles exteriores que acentúan su carácter dinámico y luce los pertinentes logos identificativos, situados igualmente en las aletas delanteras.

Por dentro, deslumbra con un volante y unos asientos de corte más deportivo, además de por los detalles decorativos en ‘Dark Miron’. El Veloce únicamente puede asociarse a los motores más potentes: el 2.2 JTD turbodiésel de 210 CV o al 2.0 turbo de gasolina de 280 CV, ambos equipados de serie con tracción a las cuatro ruedas y cambio automático.
La belleza también está en el interior

Los responsables de Alfa Romeo escuchan a los clientes y a la prensa especializada. Prueba de ello es que con la última actualización del modelo, han mejorado aquellos apartados en los que se le podía poner alguna pega al Giulia. Los cambios han afectado a la sensación de calidad percibida, al sistema multimedia, al equipamiento en materia de asistentes de conducción o la practicidad del interior.
Empezando por el último, tengo que destacar la rediseñada consola central, con huecos portaobjetos más grandes que contribuyen a mejorar la experiencia de uso en el día a día. En esta zona también podemos encontrar un sistema de carga inalámbrica para teléfonos móviles compatibles, con lo que evitamos la presencia de cables que al final siempre acaban molestando. También tengo que mencionar la renovada palanca de cambios o el mando circular desde el que se maneja el equipo multimedia, ambos con un tacto más agradable.

La pantalla central de 8,8 pulgadas y el sistema de información y entretenimiento también ha cambiado. Ahora tiene una calidad de imagen superior, un sistema operativo de última generación -desarrollado por Marelli- y además es táctil. Es compatible tanto con Android Auto como con Apple Car Play y ofrece los servicios conectados Alfa Connected Services. Gracias a ellos, desde tu teléfono móvil puedes por ejemplo abrir o cerrar el coche, saber su ubicación o notificaciones en caso de que detecte un intento de robo.
En cuanto a los asistentes de conducción, decir que están firmados por Bosch, uno de los mayores y mejores proveedores globales de este tipo de tecnología. Entre otros elementos, incluyen un radar frontal de medio alcance, una cámara de vídeo, radares traseros y una dirección de asistencia eléctrica. Englobados bajo las siglas ADAS, permiten convertir al Giulia en un coche con nivel 2 de conducción autónoma. Son capaces de ayudar al conductor en vías rápidas y atascos gracias al control de velocidad inteligente, al asistente de mantenimiento en carril, al detector de ángulo muerto activo, al reconocimiento de señales de tráfico…
Así va el Alfa Romeo Giulia Veloce 2.2 JTD Q4

Hace unos meses tuve la oportunidad de probar el Giulia 2020 con el motor 2.0 turbo de gasolina de 280 CV y acabado Veloce. Ahora hago lo propio con la variante equivalente con motorización turbodiésel. Un modelo que, al menos sobre el papel, promete ofrecer casi las mismas emociones que su hermano de gasolina con las ventajas que aporta una mecánica diésel en cuanto a frugalidad de uso.
Porque esa es precisamente una de los atributos del Giulia Veloce 2.2 JTD Q4 de la prueba, el significativo ahorro en el consumo de carburante. El de 280 CV anuncia un gasto medio oficial en condiciones de homologación en ciclo WLTP de 8,0 l/100km, mientras que el diésel reduce ese dato hasta los 5,5 l/100km. Ambos modelos, por cierto, están equipados de serie con un cambio automático de ocho velocidades de origen ZF y con un sistema de tracción a las cuatro ruedas Q4.

A ese ahorro en el gasto de combustible, que en condiciones reales es de cerca de 4 litros por cada 100 km a favor del diésel, hay que sumar la abultada diferencia de precio que hay entre ambos. Porque para hacerte con el de 280 CV tendrás que desembolsar unos 4.700 euros adicionales. Así que para que la elección del más potente tenga sentido, tienes que estar absolutamente convencido de que quieres el de gasolina, que a cambio, ofrece un sonido más agradable y unas prestaciones ligeramente superiores.
Porque en el día a día es muy difícil percibir que el de 280 CV acelera de 0 a 100 km/h en 1,6 segundos menos (5,2 frente a 6,8 segundos). Y más si tienes en cuenta que el 2.2 JTD ofrece más par motor que además está disponible desde más abajo: 470 Nm a 1.750 vueltas frente a los 400 Nm a 2.250 rpm del gasolina. En condiciones de uso normales, es decir, sin exigir el máximo al motor, el diésel se nota con más fuerza y no es necesario revolucionarlo para conseguir una aceleración adecuada para cualquier circunstancia.

A nivel dinámico, las diferencias entre ambos son prácticamente inexistentes salvo por la personalidad diferenciada de sus motores. De hecho, en orden de marcha solo hay 10 kilogramos de diferencia de peso entre los dos, algo que de nuevo, es dificilísimo de percibir a los mandos. Los dos son berlinas extremadamente ágiles, con una capacidad para cambiar de rumbo brillante apoyadas en una dirección especialmente rápida. Tanto es así que esta, por su tacto ligero y respuesta veloz, me recuerda a las de los modelos de Ferrari.
A esto último que digo también ayuda la presencia de unas enormes levas de cambio ubicadas tras el volante. Estas están fijadas a la columna de dirección, por lo que permanecen inmóviles con respecto a la posición del volante. Una configuración de lo más acertada, porque siempre sabes dónde está cada una independientemente de lo mucho o poco que estés girando. Otro apartado que me gusta mucho es la posición de conducción, que es de las mejores de la categoría si te gusta exigir al coche.

En conclusión, este Giulia Veloce con motor diésel me ha parecido un grandísimo sedán por el equilibrio que ofrece entre un comportamiento ágil y confortable al mismo tiempo. Es un coche pensado para hacer disfrutar al conductor de cada desplazamiento y todo ello sin que el resto de pasajeros se quejen, porque disfrutan de un interior cómodo y espacioso.
A destacar |
A mejorar |
Diseño exterior e interior |
Ajustes de algunos plásticos |
Comportamiento dinámico |
Sonido del motor a baja velocidad |
Dirección rápida |
Ficha técnica Alfa Romeo Giulia Veloce 2.2 JTD 210 CV Aut. AWD
|
Motor |
Cilindrada |
2.143 cc |
Cilindros |
4 en línea |
Potencia máxima |
210 CV / 3.500 rpm |
Par máximo |
470 Nm / 1.750 rpm |
Transmisión |
Caja de cambios |
Automático, 8 velocidades |
Tracción |
Total |
Suspensión |
Delantera |
Paralelogramo deformable / Resorte helicoidal / Barra estabilizadora |
Trasera |
Paralelogramo deformable / Resorte helicoidal / Barra estabilizadora |
Dimensiones |
Longitud |
4.650 mm |
Anchura |
1.860 mm |
Altura |
1.438 mm |
Distancia entre ejes |
2.820 mm |
Alimentación |
Tipo de alimentación |
Inyección directa por conducto común, turbo de geometría variable e intercooler |
Peso |
Peso |
1.615 kg |
Prestaciones |
Velocidad máxima |
235 km/h |
Aceleración 0-100 Km/h |
6,8 seg |
Consumos WLTP |
Combinado |
5,4 l/100 km |
Velocidad baja |
7,1 l/100 km |
Velocidad media |
5,5 l/100 km |
Velocidad alta |
4,7 l/100 km |
Velocidad muy alta |
5,4 l/100 km |
Emisiones WLTP |
Emisión CO2 |
143 g/km Euro 6 – Etiqueta C |
Precio |
Precio oficial |
51.064 euros |
Fotografías: Jaime Sainz de la Maza para Periodismo del Motor