Mercedes exhibe en Detroit al Clase G ganador del Dakar en 1983

Con el Dakar 2018 a punto de finalizar, no hemos podido evitar fijarnos en uno de los vehículos expuestos entre las novedades del Salón de Detroit 2018. Nos referimos al Mercedes Clase G ganador del Dakar en 1983, que está expuesto en la muestra estadounidense junto con a otros Mercedes Clase G (prueba) significativos. Pero ninguno de ellos es tan importante para la firma de la estrella como el que nos ocupa.

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Porque el Mercedes Clase G ganador del Dakar que ves en las foto, la unidad con dorsal 142, tiene el honor de haber logrado el mejor resultado en competición hasta la fecha para el icónico 4×4. Y esto impresiona más todavía si tenemos en cuenta que este el G ha estado a la venta ininterrumpidamente desde 1979. Casi cuatro décadas sin grandes cambios hasta la introducción del nuevo Mercedes Clase G 2018.

Uno de los Mercedes Clase G más especiales de la historia

Mercedes Clase G ganador del Dakar trasera

A lo largo de todos estos años, ha tenido variantes verdaderamente increíbles, tanto en lo referente a los coches de calle como de carreras. Porque no me dirás que no ‘molan’ los G 500 4×4² o G 63 6×6, pero incluso los hay mejores. ¿Un ejemplo? El desconocido Mercedes Clase G con motor de Porsche 928 que creó Porsche como vehículo de asistencia para 959 de carreras todoterreno.

Pero incluso estos no se pueden comprar con el Mercedes Clase G ganador del Dakar en 1983. Pilotado por Jacky Ickx y con Claude Brasseur como copiloto, este ejemplar logró hacerse con la victoria en un recorrido de más de 10.000 kilómetro entre París (Francia) y Dakar (Senegal). Un año antes, en 1982, Ickx y Brasseur acabaron en segunda posición con este Mercedes 280 GE, con otra unidad del 280 GE ocupando el tercer puesto.

Mercedes Clase G ganador del Dakar lateral

Insatisfechos con el resultado, volvieron a la carga un año más tarde con un coche más evolucionado. Contaba con una carrocería que no solo era más ligera gracias al empleo de aluminio, también era más aerodinámica. Y es que Mercedes usó un túnel de viento para mejorar el rendimiento aerodinámico de este Clase G con batalla corta.

Porque si algo destaca visualmente del Clase G ganador del Dakar es su trasera, con unos apéndices aerodinámicos que alargan considerablemente el conjunto. Debajo del capó se encuentra una versión evolucionada del motor de gasolina de producción, una mecánica que alcanzaba para la ocasión una potencia máxima de 230 CV.

Fuente: TopSpeed

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