Jeep Wrangler (prueba), Mercedes-Benz Clase G (prueba) y Land Rover Defender (prueba), los tres todoterrenos por antonomasia que reinan en el mercado contemporáneo han decidido verse las caras en esta comparativa. Y es que mentiríamos si dijésemos que no estábamos deseando ver a estos tres titanes del off-road pelear por la corona; pero antes de conocer el resultado veamos qué tiene que ofrecer cada uno de los aspirantes.
Jeep Wrangler
Desde América, con músculo y con mucha fuerza llega el Wrangler, uno de los 4x4 más puros y carismáticos que podemos comprar hoy en día. Por supuesto que no podía faltar en esta comparativa, donde se enfrenta a dos de sus rivales por excelencia pero, ¿qué presenta el Wrangler frente a estos?
Empezando por el motor y centrándonos en la unidad del vídeo -un Wrangler Rubicon- nos encontramos con una de las opciones más equilibradas: un diésel de 2.2 litros y cuatro cilindros capaz de producir 200 CV y 450 Nm de par.
Por supuesto la tracción total está presente en el Wrangler, pero el acabado Rubicon incluye un sistema bautizado como Tru-Lok. Detrás de este revelador apellido se esconde la posibilidad de bloquear de manera electrónica tanto el diferencial trasero como el delantero, buscando así optimizar el agarre.
A esta capacidad debemos sumarle la presencia de una reductora y unos ángulos de ataque, salida y ventral de 36º, 30º y 25º respectivamente. No suena mal, ¿verdad?
Mercedes-Benz Clase G
¿Nos crecerá la nariz si decimos que el Mercedes-Benz Clase G es uno de los todoterreno más molones de todos los tiempos? Para nada. La firma de la estrella, consciente del éxito que conlleva su 4x4 más mimado, ha decidido actualizarlo pero siempre manteniendo intacta su peculiar esencia. Y cuánto nos alegramos.
Para ser más concretos nos topamos con un G 350d, la variante diésel de este embaucador todoterreno. Detrás de dicha denominación se esconde un seis cilindros en línea turbo que se encuentra en la tesitura de producir 286 CV y 600 Nm de par.
¿El punto álgido de esta ecuación? Su sistema de tracción total y el triple bloqueo de diferencial que ofrece el Clase G, lo que nos permite calificarlo como un auténtico superdotado fuera del asfalto. Tampoco debemos olvidarnos de sus ángulos, siendo el de ataque de 31º, el de salida 30º y el ventral de 26º.
Land Rover Defender
Fue en el pasado Salón de Frankfurt donde la casa inglesa aprovechó para presentar en primicia al nuevo Defender; y nosotros caímos rendidos ante sus pies. Con una estética retro pero cargada de novedad y frescura, Land Rover dejó muy claro que había concebido a un auténtico 4x4 dispuesto a desbancar a todo aquel que osase plantarle cara.
El Defender que hoy nos ocupa cuenta a sus espaldas con el apellido D240 S, lo que implica un motor de cuatro cilindros diésel capacitado para erogar 240 CV y 500 Nm de par. A esto debemos añadirle tracción a las cuatro ruedas permanente, bloqueo del diferencial central y del trasero en opción.
¿Sus ángulos? 38º el de ataque, 40º el de salida y 28º el ventral, ofreciendo unas capacidades off-road a la altura de sus contrincantes más directos.