Su actualización era necesaria, no solo porque lleva un lustro en el mercado, sino porque desde que la marca norteamericana lo trajo a la vida, su diseño no ha tenido muy buenas críticas. Y por eso el Jeep Cherokee 2018, el restyling de la quinta generación, será la novedad en el Salón de Detroit 2018, la primera gran feria del año que se realizará en suelo estadounidense.
Son muy pocos los datos que ha emitido la marca. A las nuevas motorizaciones “más eficientes” se une un diseño “más lujoso”. Y hasta ahí se puede leer. Aunque si observamos las cuatro imágenes proporcionadas se observan los profundos cambios que ha sufrido la parte frontal, que conserva las características siete ranuras de refrigeración, pero que se ha desprendido de las controvertidas luces que se situaban a media altura. Y a eso hay que añadir unos nuevos faros más estilizados con forma de cabeza de águila.
De la zaga la modificación más evidente es la localización de la matrícula, que pasa del paragolpes al portón, rompiendo con la amplia superficie lisa de la que presumía el anterior Cherokee. Los pilotos mantienen la firma, pero su diseño es de nueva factura, dejando más protagonismo a la luz de marcha atrás. Asimismo, las protecciones del paragolpes también han sido modificadas.
La imagen del modelo rojo pertenece al Jeep Cherokee 2018 Trailhawk, la versión con mejores aptitudes off-road gracias a su mayor altura libre al suelo, el modo ‘Rocks’ y los ganchos para remolcar… o ser remolcado.
Y el interior parece que es el que guarda más parecido con el previo. La mayoría de elementos se mantienen, a excepción de algunos botones. Además, la pantalla del sistema de infoentretenimiento parece que es de mayores dimensiones. Lo que si adoptará en su gama serán nuevas tapicerías.
Hasta el 16 de enero no conoceremos todos los detalles de este nuevo Cherokee, SUV que compartirá protagonismo con el Jeep Wrangler 2018.
