2023 comenzó con una noticia horrible para el mundo del automovilismo: el 2 de enero murió Ken Block en un accidente en moto de nieve. Desde entonces se han sucedido tributos de todo tipo y su hija, Lia Block, incluso anunció que correría la temporada 2023 del American Rally Association Championship con un Subaru BRZ inspirado en su padre. Ahora, la heredera ha confirmado que va a participar en el Pikes Peak 2023 con uno de sus coches.
De hecho, retomará la tarea que dejó a medias su padre, pues en la edición de 2022 iba a participar en la prueba de ascenso más conocida del mundo con el Hoonipigasus, un Porsche 911 de lo más extremo, pero finalmente no pudo hacerlo porque tuvo un fallo de motor que no se pudo reparar a tiempo como para clasificarse para la prueba.
El legado de Ken Block continúa con una fundación en su nombre
El coche fue presentado el año pasado, como un desarrollo conjunto entre Hoonigan Industries, Huntington Beach, BBi Autosport y Mobil One. Block digamos que se aprovechó de su fichaje por Audi para poder ponerse a los mandos de un modelo de otra de las marcas del Grupo Volkswagen.

Cualquiera con algo de conocimiento de la historia de Porsche y del mundo de la competición cogerá al vuelo la referencia estética, inspirada por el mítico Porsche 917/20 ‘Pink Pig’ que participó en las 24 Horas de LeMans de 1971.
El bólido tiene un peso extremadamente ligero, de solo 1.000 kilos, que contrasta con la enorme potencia de su motor 4.0 biturbo flat-six, que desarrolla nada menos que 1.400 CV y se asocia a una caja de cambios secuencial de seis velocidades. A esto se suma una trabajada aerodinámica capaz de generar una carga enorme para dejarlo pegado al suelo, así como detalles interesantes como el hecho de que su suspensión ajustable va conectada al GPS para adaptarse en función de la carretera.
El Pikes Peak 2023 se celebrará el 25 de junio, momento en que Lia Block y el Hoonipigasus tendrán por delante un recorrido de 19,98 kilómetros, con 156 giros y que salva un desnivel de casi 3.000 metros.