El mundo de las furgonetas está sucumbiendo poco a poco a la electrificación, pero en ciertas ocasiones nos encontramos con creaciones como la que hoy nos ocupa. Y es que Volkswagen ha decidido darle una vuelta de tuerca al Volkswagen Transporter T6.1 con el apellido Sportline, aunque eso sí, solo en Inglaterra.
Estas son las 12 furgonetas deportivas más cañeras
Este maridaje representa a la versión más radical y deportiva de la furgoneta alemana, la cual recoge muchos detalles del Volkswagen Golf GTI (prueba). Además, estará disponible con carrocerías de batalla larga y batalla corta, y como kombi o furgoneta.
Volkswagen Transporter T6.1 Sportline: la variante GTI que no disfrutaremos en España
Para rendir homenaje a su nuevo apellido, el Transporter recurre a una serie de detalles exteriores e interiores de lo más llamativos. El frontal hace gala de una defensa más agresiva e imponente y de una franja roja que se incrusta en los faros al más puro estilo GTI.

El lateral se realza con unas nuevas taloneras, llantas de 18 pulgadas y una suspensión rebajada 30 milímetros que ayuda a realzar la estética y a mejorar el comportamiento dinámico. Por último pero no por ello menos importante la zaga, donde se asienta un sugerente alerón.
Pero el verdadero punto álgido del Volkswagen Transporte T6.1 Sportline lo encontramos en su apartado mecánico. Aquí se asienta u propulsor diésel de 2.0 litros y cuatro cilindros sobrealimentado por turbo que desarrolla para la ocasión 204 CV de potencia. Dicha cifra se gestiona por medio de una caja automática de siete relaciones DSG, permtiendo así que el 0 a 100 ocurra en unos respetables 8,9 segundos.
PRUEBA: Volkswagen California T6.1 Beach Tour
Si algún inglés quiere disfrutar de esta versión picante y deportiva de la furgoneta de Volkswagen será necesario que afronte un desembolso de 42.940 libras, cifra que aumenta hasta las 49.450 libras en caso de decantarse por el Black Line Edition.