Nuevas consecuencias relacionadas con el escándalo de emisiones que afecta a la marca alemana. Según indica el periódico Sueddeutsche Zeitung, Volkswagen tendría que recomprar 115.000 coches en Estados Unidos, es decir, un aproximadamente quinto del total de 580.000 vehículos afectados en el mercado estadounidense. Deberían reembolsar la cantidad íntegra pagada originalmente por sus propietarios o bien, ofrecer automóviles nuevos con un importante descuento en el precio de venta final.
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Por el momento no sabemos qué coches son los que Volkswagen tendrá que recomprar, pero esta medida podría tener su causa en las dificultadas que está teniendo el fabricante alemán para ponerse de acuerdo con la Junta de Recursos del Aire de California (CARB). Este es uno de los organismos públicos que deben dar el visto bueno a la forma en la que solucionará Volkswagen el problema de las emisiones antes de que la marca proceda a llamar a los automóviles afectados a revisión.
Y es que según afirman desde Automotive News Europe, el resto de los modelos que no tendrían que adquirir, aproximadamente unos 465.000, necesitarían reformas de consideración para poder cumplir con las exigente normativa anticontaminación local. La Agencia de Protección Medioambiental estadounidense (EPA) anunció el pasado miércoles que no están consiguiendo llegar a una solución adecuada con Volkswagen, indicando que “continuarán insistiendo para que desarrollen un remedio efectivo y apropiado lo antes posible”.
Fuentes: Automotive News Europe, Sueddeutsche Zeitung.
