El SEAT 127 es el sustituto natural del 850. Se lanzó al mercado en 1972 y estuvo en activo diez años mientras contribuía a motorizar el país. Se vendieron más de 1,3 millones de unidades de este popular utilitario, del que derivaron varias versiones, incluyendo el 127 Fura y el 127 carrozado por el diseñador y carrocería español Pedro Serra Vidal, autor de modelos tan prestigiosos como el Pegaso Z-102. Sin embargo, el protagonista de estas líneas es el poco conocido SEAT 127 Samba de 1978.

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Para entender cuál es el origen del popularmente conocido como SEAT Samba hay que conoce a la empresa Emelba S.A.. Emelba fue un carrocero español situado en el municipio de Arbucias, en Gerona, que estuvo en activo entre 1978 y 1986. Trabajó sobre diferentes modelos de Talbot, Peugeot, Lada, Citroën y Chevrolet, pero los vehículos de SEAT fueron los más demandados. Es autor de diferentes vehículos personalizados, como la pick-up 127 Póker o el Emelba 7, un monovolumen basado en la primera generación del SEAT Ibiza.

SEAT 127 Samba (1978): el 127 descapotable del carrocero Emelba

SEAT 127 Samba 1978

Pero si por algo es conocido el carrocero catalán es por el 127 Samba. Fue su primer proyecto, tomaba como base el utilitario de SEAT y lo equipaba con una carrocería descapotable hecha a medida. El concepto detrás del Samba era similar al del Citroën Mehari, un vehículo de estilo playero, sin techo, ni ventanas laterales, dos pequeñas puertas y una sección trasera similar al de una camioneta.

Este curioso derivado del SEAT 127 era en realidad una versión descapotable ensamblada bajo licencia. Se le considera una reproducción del Fiat 127 Scout del carrocero italiano Rayton Fissore, también conocido como Fiat 127 Moretti Midimaxi. Existían dos versiones diferentes, una totalmente descapotable y otra semirrígida. La segunda equipaba un techo rígido extraíble completo, con ventanas laterales y luneta trasera.

Además, el modelo descapotable podía ser equipado con un techo de lona que integraba ventanas de plástico en la parte trasera. Delante, unas ventanillas correderas se instalaban sobre las puertas, lo que brindaba a los pasajeros una cabina completamente cerrada. Además, equipaba una práctica semi-baca que permitía transportar objetos sobre el techo, como muestran las fotos con una pareja de esquís. También había otros tipos de estructuras para el techo, como uno que permitía la instalación de un techo tipo bikini que dejaba al descubierto los laterales de la cabina.

Una producción de apenas 1.000 ejemplares

SEAT 127 Samba 1978

Lucía, además, bastantes modificaciones en la carrocería. Los pasos de rueda rectangulares ofrecían suficiente espacio para la suspensión elevada y estaban acompañados de unos nuevos parachoques. Al configurar de nuevo la zaga, se reubicaron los pilotos en disposición vertical. También se equipó una puerta trasera de abertura horizontal que basculaba sobre dos bisagras laterales.

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En el interior del 127 Samba había cuatro plazas, pero existía la opción de retirar los asientos traseros para convertirlo en un pick-up. El salpicadero, el volante y los asientos se conservaron del modelo original. Según hemos podido saber, la producción del SEAT 127 Samba de 1978 alcanzó aproximadamente las 1.000 unidades. Todos los ejemplares se vendieron por aproximadamente 470.000 pesetas. Por desgracia, no hemos podido encontrar referencias al apartado mecánico, por lo que desconocemos qué motor o gama de motorizaciones había disponibles.

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