Este es uno de los coches compactos deportivos más recordados de la historia. Toda una leyenda que rivalizó con grandes de su época como el Volkswagen Golf MK.2, el Renault Supercinco o incluso el Peugeot 205. Y es que hace poco tiempo tuve la oportunidad de disfrutar la prueba del Opel Corsa A GSi, el de primera generación.
Recientemente se han cumplido ni más ni menos que 40 años de la aparición de este pequeñín que muchos recordamos entre los coches de nuestra infancia. Aunque jamás pensé que a conducir uno. Y menos en unas condiciones tan fantásticas.
Aquel Opel Corsa A en su versión deportiva se presentó a finales de la década de 1980 con una potencia comedida, pero una relación de peso sensacional. Analógico, vintage, retro… Llámalo como quieras. Pero es indiscutible que se trata de todo un clásico. Muy cotizado hoy en día, por cierto.
Un diseño histórico
Opel me sorprendió en su sede de Rüsselsheim, cerca de Frankfurt, con una unidad del Corsa GSi en rojo brillante y otra en negro. Seguramente los colores más icónicos del modelo. Dos vehículos sacados directamente del museo de la marca y con menos de 40.000 kilómetros. El rojo, de hecho, lo compraron en España. Curiosidades de la vida.
Se trata de un vehículo muy pequeño. Con unas medidas de 3.625 mm de largo, 1.535 mm de ancho 1.365 mm de alto. Su capacidad de maletero era de apenas 225 litros y contaba con cinco asientos donde… Sí, llegaron a viajar familias. ¿Cómo? No lo sé, de la misma manera en la que viajaban en los (prueba) Seat 600. Una batalla contra las leyes de la física.
Posee formas cuadradas y aristas duras, con dos grandes faros al frente y una pequeña parrilla con el logo de GSi. La parte trasera, muy vertical y con unas aletas que esconden parte de las ruedas posteriores. Recuerda, inevitablemente, a un coche de rallyes de la época.
En el interior, asientos de tela y poquísimo espacio. Con mis 1,89 metros de altura apenas podía caber en el asiento del conductor. Al menos la palanca de cambios se eleva sustancialmente y queda muy a mano. Los pedales, duros. Sin dirección asistida, indicadores de voltaje y presión de aceite… Un coche de verdad.
Un motor atómico para 865 kg de peso
Efectivamente, ese es su punto fuerte. Un motor de 4 cilindros en línea de 1,6 litros atmosférico de inyección con 2 válvulas por cilindro (SOHC) que producía 100 CV y 135 Nm de par máximo hasta casi las 6.000 rpm. Compresión de cilindros de 10:1 y 63 CV por litro. Nada mal.
Aunque hay gente que se ha arriesgado a montar culatas de 16 válvulas o incluso la del motor 1.4 del Corsa GT, con colector de admisión modificado y doble carburador. Un follón interesante que, sin embargo, puede llegar a elevar su potencia con una buena puesta a punto. Pero esto son historias de las calles, más allá del coche de serie.
El Corsa A GSi podía acelerar de 0 a 100 km/h en 9,8 segundos y alcanzar 186 km/h de velocidad máxima. Unas buenas cifras para la época. Desarrolló 8,62 kg/CV y un consumo que superaba ligeramente los 7,0 litros a los 100 kilómetros.
Yo decidí exprimirlo al máximo por autovía y las curvas de Alemania. Y hay que decir que son coches que necesitan ser conducidos con aplomo y sin miedo. Sorprendentemente, agarra muy bien a gran velocidad y no da síntomas de subviraje pese a ser un tracción delantera. Aunque la ausencia de controles electrónicos los hace derrapar en las salidas de curva a baja velocidad.
El balanceo es notable. Se nota que las suspensiones de la época son de otra pasta, pero sus pocos kilogramos no agudizan esa transferencia de pesos y le da brío sobre el asfalto. De hecho, impresiona bastante su velocidad. Es carne de modificaciones y subidas de rallye.
Cinco marchas con un recorrido notable en la palanca que, quizá, es su punto negativo. Pero el sonido del escape sin catalizar a más de 5.000 rpm y la dificultad de llevarlo al límite te envuelve tan grácilmente que te olvidas de todo lo demás. Es un coche para disfrutar del aroma a otros tiempos. A tiempos mejores, sin ninguna duda.
¿Te pica la curiosidad de la insignia del Opel GSi, eh? Pues siento decirte que no están nada baratos. Una buena unidad oscila fácilmente los 7.000 euros de precio en el mercado de segunda mano actual. Y si quieres dar el salto a un Kadett GSi 16V y 150 CV… Ya puedes preparar más de 8.000 euros.
A destacar | A mejorar |
Simpleza mecánica y ligereza | Un espacio interior muy escaso |
Estética deportiva | Palanca de cambios demasiado larga |
Gran paso por curva | Regulación del asiento delantero prácticamente inexistente |
Ficha técnica Opel Corsa A GSi (1988) | ||
Motor | Cilindrada | 1.598 cc |
Cilindros Disposición |
Gasolina 4 cilindros en línea |
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Potencia máxima | 100 CV a 5.600 rpm | |
Par máximo | 135 Nm de 3.400 rpm | |
Alimentación | Tipo | Inyección MPI Bosch L3 Jetronic |
Transmisión | Caja de Cambios | Manual, 5 velocidades |
Tracción | Delantera | |
Suspensión | Delantera | Independiente tipo McPherson con barra estabilizadora |
Trasera | Independiente con muelles integrados en el cuerpo del amortiguador |
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Frenos | Delanteros | Discos ventilados |
Traseros | Tambores | |
Dimensiones | Longitud | 3.650 mm |
Anchura | 1.540 mm | |
Altura | 1.360 mm | |
Distancia entre ejes | 2.340 mm | |
Maletero | Capacidad | 225 litros |
Peso | Peso | 830 kg |
Prestaciones | Velocidad máxima | 186 km/h |
Aceleración 0-100 Km/h | 9,8 segundos | |
Consumo | Medio | 7,2 l/100 km |
Ciudad | 9,0 l/100 km | |
Carretera | 5,6 l/100 km | |
Producción | Años | 1988-1993 |
Precio | Precio en la época | 1.483.000 pesetas (1988) |
Fotos: Rodrigo García Vita, Opel
Fue mi primer coche a los 18 y me encantaba, estuvo con nosotros casi 30 años sin ningún problema, al verlo me invade la melancolía