El fin de semana pasado, los radares de Tarragona registraron un nuevo (y dudoso) récord de velocidad. Uno de estos dispositivos interceptó a un vehículo que circulaba a más del doble de lo permitido por la vía y cuyo conductor dio positivo en el test de drogas. Lo tenía todo… y fue pillado con un BMW M2 CS a 256 km/h por la AP-7 tras haber consumido cocaína.
Los Mossos d'Esquadra han informado de una de las infracciones más llamativas que han tenido lugar en las carreteras tarraconenses: un conductor de 48 años circulaba a 256 km/h por la AP-7 a la altura de la citada provincia cuando las señales de la carretera marcaban que el máximo debía ser de 120 km/h. Sí, el vehículo superaba por más del doble la velocidad de la vía.
Todo apunta a que el hombre aprovechó el poco tráfico que había para dejar caer (de más) el pie sobre el acelerador… de su BMW M2 CS (prueba). Los Mossos han publicado una imagen del coche infractor en sus redes sociales y por los detalles de la zaga (como el pequeño alerón) parece que se trata de una de las unidades del deportivo alemán. Un vehículo que equipa un motor de seis cilindros en línea y doble turbo de 450 caballos y cuenta con suspensión Adaptiva M o neumáticos específicos Cup, entre otros detalles exclusivos. Y, por cierto, su precio arranca en 103.900 euros.
Las multas
El conductor es vecino de Olèrdola, un municipio de la comarca del Alto Penedés (Barcelona), y también dio positivo por cocaína: por todo ello, ha sido acusado de un delito contra la seguridad vial. A nivel económico, cuando un conductor circula a una velocidad superior a los 191 km/h en una vía limitada a 120 la multa es de 600 euros. Cantidad que hay que sumar al positivo por drogas que supone una sanción de entre 500 y 1.000 euros.
Vídeo: el BMW M2 CS completa una vuelta a Nürburgring en 7:42.99
Saltarse el límite de velocidad a ese nivel supone la entrada en acción del Código Penal: puede comportar una pena de prisión de entre 3 y 6 meses, una multa de entre 6 y 12 meses y la retirada del carné entre 1 y 4 años. Además, conducir bajo el efecto de las drogas también puede suponer los mismos castigos. Y todo esto sin tener en cuenta que puede ser calificado como conducción temeraria. En este caso, la pena de cárcel puede ser de 6 meses a 2 años y la retirada del carnet de 1 a 6 años.