En 2002, Moskvitch detuvo la producción de automóviles cuando se declaró en quiebra y, finalmente, en 2006, echó el cierre. 14 años después, la marca rusa reanudará la producción y lo hará el próximo mes de diciembre, según ha anunciado el alcalde de Moscú, Sergei Sobyanin.
Desde el pasado mes de mayo se vienen escuchando rumores a cerca del regreso de Moskvitch, cuando Renault decidió vender su participación del 67,69% en AvtoVAZ (propietaria de Moskvitch) al Instituto de Investigación y Desarrollo de Automóviles de Rusia (NAMI). Una decisión que la marca francesa tomó tras la invasión rusa de Ucrania.
Moskvitch reinicia la producción en diciembre
Cuando la compañía francesa decidió marcharse de Rusia, la planta de Renault Avtoframos detuvo la producción y, desde entonces no ha vuelto a fabricar un solo vehículo. Pero esa fábrica depende de las autoridades locales y ha sido renombrada Planta de Automóviles de Moscú Moskvitch. Según Automotive News Europe, el alcalde de Moscú ha confirmado que los nuevos vehículos de Moskvich comenzarán a salir de la cadena de montaje a partir de diciembre y ha prometido que se mantendrán los miles de puestos de trabajo en la “nueva” fábrica.
El plan ahora es ensamblar 600 vehículos hasta final de año, de los cuales 200 serán totalmente eléctricos. Para 2023, Moskvich tiene la intención de aumentar la producción a 50.000 unidades. Para ello, se están invirtiendo cinco mil millones de rublos en la planta, equivalentes a unos 82 millones de euros al cambio actual, junto con el fabricante de camiones Kamaz que, a su vez, está buscando un socio para fabricar coches y podría asociarse con la china JAC Motors, según reporta ANE.
Cabe recordar que Renault se marchó de Rusia con un acuerdo que le permite recomprar su participación durante los próximos seis años. Lo mismo hizo Nissan, que vendió sus activos a NAMI por un euro y puede regresar en cualquier momento hasta 2029.