La compañía norteamericana le ha dado un toque picante a su buque insignia con la edición limitada Jeep Grand Cherokee S. Esta versión adopta elementos en color Granite Crystal que le dan un toque distintivo a la vez que consiguen aumentar la imagen deportiva del SUV premium: logos, parrilla frontal y llantas de 20” son algunos de ellos. Otras diferencias respecto al modelo base las encontramos en la calandra, en las ventanillas, estas dos en acabado Negro Brillante; y en las colas de escape dobles, en Black Chrome.
El interior también recibe algunos cambios: detalles de color Gun Metal anodizado, pedalier de aluminio firmado por Mopar, molduras de madera en negro, costuras de esta misma tonalidad en el volante, salpicadero y asientos, estos últimos tapizados en piel Nappa perforada y Alcantara.
Con todos estas modificaciones, el todocamino norteamericano gana en deportividad estética, acercándose al radical Jeep Grand Cherokee Trackhawk 2018 que ya hemos probado.
Y digo estética porque es cierto que equipa suspensión deportiva de serie, pero el motor disponible es el diésel 3.0 de 250 CV que para la ocasión trabaja asociado a un cambio automático de ocho velocidades.
El Jeep Grand Cherokee S, que tiene un precio de partida de 80.000 euros, trae un completo equipamiento de serie que incluye: sistema UconnectTM con pantalla táctil de 8,4″ con Apple CarPlay y Android Auto, cuadro de instrumentos con pantalla de 7”, sistema de sonido Alpine de 506 W con subwoofer y Active Noise Cancellation, techo panorámico doble, asientos calefactables y con climatización -traseros solo con calefacción-, sistema de aviso de colisión frontal, de mantenimiento de carril, control de crucero adaptativo, de ángulo muerto y de cruce, sensores delanteros y traseros, cámara de visión trasera y sistema de asistencia al aparcamiento.
Las primeras unidades de esta edición limitada llegarán en mayo de 2018 (aquí encontrarás todos los coches que llegarán en 2018 y 2019).