
A priori, los coches de Samuel Eto’o no deberían distar mucho de los típicos superdeportivos de cualquier futbolista de élite. O, en este caso, ex futbolista. Sin embargo, al delantero camerunés le apasiona el mundo del motor, entre otros. Y lo tiene, junto a relojes y teléfonos móviles, principalmente, como uno de sus caprichos más caros. Estos son algunos de los ejemplares de su colección.