Con motivo de la celebración del GP de Australia 2016, el fabricante británico ha presentado al Bentley Continental GT Black Speed. Desarrollado por la división de pedidos especiales de Bentley, Mulliner, estamos ante una nueva edición especial del Continental GT de la que fabricarán, en este caso, un total de 10 ejemplares. Todos ellos se comercializarán en exclusiva en los mercados australiano y neozelandés.
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El nuevo Continental GT Black Speed luce un aspecto exterior realmente parecido al de la última edición limitada del modelo que había presentado la marca, el Bentley Continental GT Monster by Mulliner. Como este último, cuenta con una carrocería pintada en color negro y que luce multitud de elementos rematados en color rojo a modo de contraste, componentes como el faldón delantero, las taloneras o el marco que recorre el difusor trasero.
Además, el Bentley Continental GT Black Speed recibe varios elementos provenientes de la variante más radical, potente y deportiva del coupé británico, el Bentley Contiental GT3-R, como los frenos de disco de material cerámico. En el habitáculo, volvemos a encontrarnos con la misma combinación cromática del exterior y con una serie de bordados con la leyenda ‘Black Speed’ ubicados en los reposacabezas de los asientos.
El Continental GT Black Speed únicamente se ofrecerá en Australia y Nueva Zelanda asociado al motor W12 sobrealimentado, un propulsor que desarrolla 635 CV de potencia, 820 Nm de par motor y que es capaz de lanzar a este coloso de 2.395 kilogramos de peso de 0 a 100 km/h en 4,2 segundos. La velocidad máxima está fijada en 331 km/h. Los precios en el mercado australiano van de los 525.000 a los 600.000 dólares australianos en función del equipamiento escogido.