BMW M1, otro de los coches creados por dos marcas diferentes
Para el desarrollo del legendario BMW M1 (prueba), la firma de Múnich recurrió a la ayuda de Lamborghini. A mediados de los 70, la compañía italiana era el fabricante con mayor experiencia en la creación de deportivos con motor central. Sus ingenieros se encargaron del desarrollo de la estructura del chasis, suspensiones y geometrías, mientras que BMW se ocupaba de la fabricación artesanal.
Sin embargo, Lamborghini se vio forzado a abandonar el barco por problemas financieras tras la creación de apenas media docena de prototipos, dejando en manos de BMW un proyecto iniciado por dos marcas diferentes.