Los años 80 significaron todo un derroche de ingeniería, competición y grandes pilotos unidos para hacer legendario el Campeonato del Mundo de Rallyes. Entre 1982 y 1986 se disputaron todas las temporadas del Grupo B, una categoría de coches de alto rendimiento y pilotos legendarios que tuvo como trasfondo una épica batalla entre los principales fabricantes de coches europeos. Hoy te traigo un vídeo como tributo al Grupo B de rallye, la era dorada de la competición.
Conocido comúnmente como la “era dorada de los rallyes”, el Grupo B presentaba pocas restricciones en términos de tecnología, diseño y prestaciones, lo que permitió a las marcas que participaban en el campeonato desarrollar coches capaces de alcanzar velocidades estratosféricas. En su último año, los coches de rallye del Grupo B producían más de 500 CV de potencia, más del doble que producían los coches de rallye antes de la entrada en vigor de esta categoría.
Tributo al Grupo B de rallye, la era dorada de la competición
En su apogeo, los coches como el Audi Quattro S1, el Lancia 037, el Peugeot 205 T16, el Lancia Delta S4 y el Renault 5 Turbo discurrían a gran velocidad entre las etapas de los rallyes más famosos del mundo. Y luego estaban los espectadores. A diferencia de los rallyes de hoy en día, donde el público está lo suficientemente separado de los coches como para estar seguros, a mediados de la década de 1980 los fans se agolpaban en las cunetas, en las curvas de las etapas e incluso en la pista donde debían pasar los participantes, con imágenes tan espectaculares como terroríficas.
Esta combinación de coches potentes, pilotos habilidosos y espectadores sin miedo a la muerte tuvo como consecuencia multitud de accidentes mortales, incluyendo uno en Portugal donde murieron cuatro personas y otras 31 resultaron heridas después de que un Ford RS200 se estrellara contra una multitud de espectadores. El Grupo B era cada vez más peligroso y algunos ya no veían con buenos ojos esta categoría, a pesar de que en su último año se estaban desarrollando los coches del Grupo S (categoría que jamás llegó a disputarse).
19 prototipos homologados del Grupo B que no llegaron a competir
Todo llegó a su fin el 2 de mayo de 1986, cuando Henri Toivonen tuvo un accidente con su Lancia Delta S4 durante el Tour de Corse. El depósito de combustible del automóvil se dañó durante la caída contra los árboles y Toivonen y su copiloto, Sergio Cresto, murieron quemados. El Grupo B fue cancelado al final de ese año.
El vídeo (en inglés) que ilustra estas líneas es un tributo que recopila imágenes espectaculares de la edad dorada del Grupo B de rallyes, con los coches más potentes y sus pilotos legendarios. También apreciarás el peligro que corrían los espectadores, la extenuación a la que eran sometidos los pilotos que conducían los coches del Grupo B y el trágico accidente que puso el punto y final a uno de los capítulos más gloriosos en la historia del Campeontao del Mundo de Rallyes. No te lo pierdas.