Los motores diésel, por lo general, y especialmente los de gran cilindrada, suelen ser bastante robustos. Este tipo de propulsores soportan potencias elevadas con grandes niveles de par motor, incluso cuando se aplican modificaciones extremas como la que llevaba esta camioneta RAM. Sin embargo, la mecánica tiene un límite, y a veces encontrarlo es más fácil de lo que parece.
Los especialistas de Randy’s Transmissions, con base en Utah (Estados Unidos), estuvieron trabajando en este RAM 3500 HD de 2006 con el objetivo de extraer el máximo rendimiento a su motor diésel Cummins. La meta eran 3.000 CV (sí, has leído bien), y pretendían obtenerlo a partir de un propulsor V8 de 6.7 litros.
El exceso de potencia provocó que el motor explotara en el banco de pruebas
Entre las mejoras llevadas a cabo en el V8 diésel se encontraba un sistema de inyección de agua y metanol, así como una configuración con tres turbos capaces de generar 130 psi de presión de soplado. Esto es suficiente para generar la impresionante cifra de 2.200 CV en el cigüeñal, potencia que se reducida alrededor de un 15% a su paso por la transmisión cuando llega a las ruedas.
Para conseguir alcanzar los ansiados 3.000 CV de potencia, los mecánicos habían instalado un sistema de óxido nitros de tres etapas que aumenta la presión a 150 psi. En teoría, la camioneta diésel es capaz de completar el ¼ de milla en 8 segundos, lo cual es impresionante dado el tipo de vehículo del que se trata.
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El objetivo este pasado fin era el de probar la camioneta en un banco de potencia en búsqueda de los ansiados 3.000 CV. Por desgracia, todo salió mal. En mitad de una de las tiradas en el banco, el motor explotó. La detonación hizo saltar en pedazos la parrilla, el capó, el parachoques y otras piezas tanto de la carrocería como de la bahía.
Randy’s Transmissions ha publicado una serie de vídeos en su perfil de Instagram donde puedes ver el estado en el que se encuentra la camioneta y cómo quedó el motor después de que explotara. Si tienes unos minutos, te aconsejo que lo veas para comprobar lo que sucede cuando un motor dice basta.