Tesla evoluciona el sistema de conducción autónoma en su última actualización que afectará tanto a los sedanes Tesla Model S (prueba) y Model 3, como al SUV Model X. Se trata de una serie de nuevos hardwares que han sido desarrollados para mejorar el funcionamiento y la respuesta del famoso sistema autónomo de conducción. Será parte del equipamiento de serie, aunque supondrá algunas restricciones de equipamiento.
Ha sido denominado como nivel 5 del sistema de conducción autónoma AutoPilot. El anterior nivel, el 3, se describía también como ‘automatización condicional’, ya que el coche se encargaba de la aceleración, los frenos y la dirección mientras se monitoriza el entorno en ciertos modos de conducción. Sin embargo, las personas aún deben sentarse tras el volante para ejercer gran parte de las acciones de conducción, como la dirección, los frenos y la aceleración, controlar la carretera, cambiar de carril, usar los intermitentes y responder a imprevistos.
Es en este punto donde llega el nivel 5 del AutoPilot, un sistema que es capaz de hacer frente a la conducción de forma totalmente autónoma sin la necesidad de que un conductor supervise cada acción. Para ello, todos los modelos de Tesla estarán equipados con ocho cámaras de visión 360º con una capacidad de visualización de hasta 250 metros. Estas cámaras se sitúan en zonas tan comunes como el parabrisas delantero y los pilares B, y en zonas menos ordinarias como los guardabarros traseros para una visión posterior.
Por otro lado, los sensores de ultrasonido empleados para detectar los obstáculos a distancias cercanas han sido actualizados hasta el nivel 5 del sistema de conducción autónoma. Tesla ha instalado 12 sensores alrededor del frontal y la zaga que permite detectar objetos al doble de distancia, mientras que un radar frontal permite aumentar el nivel de agudeza del sistema y ver a través de la lluvia, niebla, polvo e incluso el coche que precede.
Sin embargo, la implementación de esta nueva versión del AutoPilot supone tener que renunciar a equipamiento tecnológico tal como el sistema de frenado de emergencia y la alerta de colisión frontal, así como el control de crucero adaptativo. Tesla dice que los sistemas permanecerán desactivados en los nuevos modelos hasta que puedan “calibrar aún más el sistema utilizando millones de kilómetros de conducción en el mundo real”.