El Skoda Enyaq Sportline iV añade un extra de deportividad al SUV eléctrico de Skoda, posicionándose como un acabado de mayor atractivo, que luce un exterior e interior específico, modifica ligeramente la puesta a punto del chasis y solo es compatible con las motorizaciones intermedias de la gama.
El todocamino ya tiene, de base, una estética bastante dinámica, pero aquí lo potencia todavía más gracias al diseño de las llantas Vega (20 pulgadas) o Betria (21”) combinado con el paragolpes específico, los faros full LED Matrix y los múltiples elementos acabados en negro diseminados por la carrocería, tales como el marco de la falsa parrilla, el de las ventanillas, las barras del techo y las carcasas de los retrovisores.
El tono oscuro sigue estando presente en el habitáculo ya que, salvo por la iluminación ambiental, tanto el cuero sintético del salpicadero, como los paneles de las puertas y la tapicería de los asientos deportivos con reposacabezas integrados son de color negro. Solo está presente el gris en las costuras de contraste y también hace aparición un símil de fibra de carbono en algunas molduras.
La marca checa apunta que el Skoda Enyaq Sportline iV cuenta con un chasis deportivo específico que es 15 mm más bajo en la parte delantera y 10 en la trasera, pero es el único cambio que experimenta en esta faceta.
El acabado puede combinarse con tres versiones mecánicas:
- Skoda Enyaq Sportline iV 60: 177 CV, tracción delantera, 160 km/h de punta, batería de 62 kWh y 400 km de autonomía
- Skoda Enyaq Sportline iV 80: 204 CV, tracción delantera, 160 km/h de punta, batería de 82 kWh y 520 km de autonomía
- Skoda Enyaq Sportline iV 80x: 265 CV, tracción integral, 160 km/h de punta, batería de 82 kWh y 510 km de autonomía
