En un pueblo italiano llamado Acquetico un radar ha puesto 58.568 multas de velocidad en dos semanas. La cifra, de récord, pone de manifiesto que todas las quejas de los vecinos por las continuas violaciones del límite de velocidad eran más que fundadas.
Apenas 120 habitantes tiene el pueblo y la mayoría de ellos había interpuesto quejas por la situación, lo que llevó a alcalde, llamado Alessandro Alessandri, a hacer una prueba durante el pasado mes de septiembre, instalando un radar de velocidad en la carretera que cruza el pueblo durante 15 días. El resultado fue aplastante.
Las 58.568 multas recogidas muestran que cada pocos minutos pasa un infractor por la vía, superando la velocidad máxima permitida en esta, que es de 50 km/h, y llegando en el caso más flagrante a un individuo que pasó por allí a 134 km/h. Muchos de los “cazados” superaban los 100 km/h, lo que supone ir a más del doble de la velocidad permitida, y la práctica totalidad de los 20 infractores que iban a mayor velocidad lo hicieron a plena luz del día.
Al parecer, la ruta que atraviesa Acquetico está muy transitada ya que conecta la Región de Piamonte con la costa norte de Italia. Además, es una de las preferidas por muchos motoristas porque no hay badenes ni radares y los tramos entre pueblo y pueblo presentan un asfalto ancho y en muy buen estado.
Debido a los resultados, el radar seguramente pase a ser permanente, algo que tampoco es que haga mucha ilusión al Alcalde, que admite que no le queda más remedio: “no queremos hacer dinero con las multas, pero es necesario para proteger la seguridad de la gente”.
Fuente: BBC.