Cuando te conviertes en uno de los coches más vendidos de España durante un largo período de tiempo que comprende varios meses, está claro que no has tenido suerte. No es flor de un día. Por eso resulta tan interesante esta prueba del MG ZS 1.0 T-GDi manual Luxury. Un SUV chino que ha tirado la puerta abajo y del que te voy a contar en estas líneas todo lo que esconde.
No es ningún secreto, eso sí, que su éxito radica en tratarse de uno de los vehículos más baratos de comprar en nuestro país. Ahora, en el ocaso de esta versión, es cuando quizá más interesante resulte: ya no hay fallos de juventud a la vista y todas las cartas están sobre la mesa.
Un aspecto aséptico y para nada 'barato'
El diseño del MG ZS no es como aquellos modelos chinos que hace ya alguna que otra década parecían (y en realidad, lo eran) copias de los vehículos europeos, americanos o japoneses. Este SUV cuenta con un aspecto que podría parecer algo 'soso' a priori, pero que está hecho, y así lo demuestran sus ventas pues es por los ojos por donde primero entra un coche, para gustar a todo el mundo.
Unos faros afilados delante flanqueando a una gran parrilla con el logo en el centro, las líneas de tensión justas y necesarias para marcar su carrocería, elevación del suelo típica de cualquier SUV, inclusión de protecciones plásticas y faros traseros simples y minimalistas, como el portón. La única 'pega' que le pongo son las molduras cromadas que imitan los escapes.
Además, el de verdad queda visible a poco que te agachas. Es un coche armónico en sus formas y proporciones, pues sus medidas le convierten en un SUV con el que es fácil maniobrar en el día a día pero con un espacio interior más que suficiente para llegar a viajar con un equipaje familiar. A saber: 4,32 metros de longitud, 1,81 de anchura y 1,65 de altura.
El interior del MG ZS, una sorpresa
Desde mi punto de vista, el habitáculo del MG ZS es lo que más llama la atención. Parece un salpicadero de un coche bastante más caro, pues abundan las superficies tapizadas y mullidas. Los ajustes son sencillamente correctos, pero el hecho de que prácticamente todo esté forrado en símil de piel con costuras en rojo en esta terminación, es sin duda digno de resaltar.
Los asientos son muy cómodos, aunque no brillan por sujeción, pero su diseño es bonito e integra el logo de la firma en el reposacabezas. El del conductor tiene regulación eléctrica, por cierto. Además, los botones del volante son físicos, y también los que conciernen al sistema de climatización y también al de audio. Su tacto es algo 'plasticoso', pero se agradece mucho por ergonomía y de cara a evitar distracciones al volante.
La instrumentación es parcialmente digital, con una pantalla central cuya personalización es casi nula, pero que expone muy bien los datos. Y a los lados hay indicadores para velocidad y revoluciones en tiempo real, así como para el nivel de combustible o la temperatura. En donde sí que hay una pantalla táctil de 10,1 pulgadas que controla la mayoría de las funciones es en la consola central.
Está muy bien integrada bajo los aireadores y cuenta con conectividad Android Auto y Apple CarPlay. No obstante, su sistema multimedia me parece de lo peor de este coche. Aunque es intuitivo, resulta desesperadamente lento y los grafismos están algo anticuados. Ahora bien, si tienes algo de paciencia, sus funciones principales las cumple.
Los huecos que tiene en la cabina no son especialmente grandes, pero caben las cuatro cosas que sueles dejar al conducir, como las llaves, la cartera o las gafas de sol. Por supuesto, cuenta con un doble portavasos que tiene la utilidad que tú le quieras dar, así como diversos puertos USB para cargar dispositivos móviles, indispensables a día de hoy.
Notable por plazas traseras y maletero
El MG ZS tiene una distancia entre ejes de 2,65 metros que está realmente bien aprovechada. El espacio para las piernas de los pasajeros adultos de la fila posterior de asientos es muy bueno, y personas de incluso más de 1,90 metros de altura cabrían sin estrecheces. Eso sí, dos. Un tercer pasajero central iría molesto por anchura y por colocación de los pies.
El túnel de transmisión es alto y ancho, lo que implica que para desplazamientos urbanos puede ser útil en este sentido... pero poco más. También hay puertos USB en estas plazas traseras, y su maletero tiene una capacidad mínima de 448 litros. Las formas interiores no son todo lo regulares que se desearía, pero es grande y la boca de carga también resulta amplia. Y si abates la segunda fila de asientos obtendrás hasta 1.166 litros. ¿Lo más sorprendente? Estas capacidades son exactamente iguales en el MG ZS EV (eléctrico).
¿Cómo es su motor y sus prestaciones?
En la unidad de esta prueba del MG ZS 1.0 T-GDi manual Luxury estoy con la motorización tricilíndrica de un litro y 111 CV de potencia, así como 160 Nm de par motor máximo. Con ella ligada a una caja manual de seis relaciones, este SUV chino acelera de 0 a 100 km/h en 11,2 segundos y alcanza una velocidad punta de 180 km/h. Como ves, son cifras correctas si atendemos a sus características.
Su peso, del que te hablo un poco más abajo, ayuda a ello. Aunque lo que no consigue es mantener a raya el consumo, pues la homologación del ciclo WLTP nos arroja un dato combinado de 6,6 l/100km. Lo cierto es que no es difícil coquetear con los 7 o los 7,5, por lo que la eficiencia no es su fuerte. Sea como fuere, me parece algo completamente pasable dado, de nuevo, su precio. Siempre aparece su precio. Y no es para menos.
Prueba del MG ZS 1.0 T-GDi manual Luxury: así va en marcha
Al volante, el MG ZS 1.0 T-GDi es un coche correcto. Su potencia no es demasiada, pero dado que es un coche que supera por poco los 1.200 kg, tampoco necesita mucha más. Es verdad que a la hora de afrontar repechos o aceleraciones prolongadas se puede quedar algo escaso, pero para eso siempre puedes jugar con su caja de cambios manual de seis relaciones.
Una transmisión correcta, aunque con los recorridos algo largos. Pero es agradable de usar. Como agradable es su dirección, con un peso y unas sensaciones que sorprenden para bien. Esto he de destacarlo, pues es un punto en el que suelen flaquear coches de su precio. La suspensión está orientada hacia el confort y su tarado es blando. El balanceo en cambios de apoyo se deja notar, pero de nuevo esa ligereza ayuda a que no sea molesto.
Seguramente sea en el ruido interior en donde más inconvenientes tenga en marcha el MG ZS de esta prueba. Y es que la sonoridad a velocidades de autopista es elevada en el interior, tanto de viento, como de rodadura como especialmente de su motor cuando se revoluciona, el cual tampoco puede presumir de un 'rugir' especial o de un sonido bonito, de los que gusta 'estrujar'.
No obstante, como pasa con el resto del coche, creo que poco más se puede pedir por su precio. Es un coche fácil de manejar, con buena visibilidad y que resulta cómodo tanto en desplazamientos rutinarios como de viaje. No es para nada un vehículo desagradable de conducir o que evidencie una falta flagrante de estabilidad. En absoluto. De hecho, en general considero que cumple en todo.
Gama y precios del MG ZS
La oferta de motorizaciones y acabados del MG ZS comienza en 17.390 euros, sin contar con descuentos o financiaciones. Es una gama algo extraña, pues se estructura en dos únicas terminaciones denominadas Comfort y Luxury. No obstante, el Comfort ya cuenta con todo el equipamiento necesario para un uso estándar.
La cuestión es que las mecánicas se dividen en dos motores de gasolina y otros dos sistemas de propulsión 100% eléctricos, con etiquetas C y 0, respectivamente. El escalón de acceso lo impone un 1.5 atmosférico de 106 CV, mientras que el 1.0 Turbo de esta prueba es el siguiente por precio. En cuanto a los eléctricos, pueden tener bien 156 o bien 177 CV.
Conclusión de la prueba del MG ZS
Durante todo el tiempo que este chino lleva en el mercado no ha engañado a nadie: es un coche honesto. Tanto es así que en esta prueba del MG ZS 1.0 T-GDi manual Luxury hemos salido sorprendidos para bien. La cuestión es que nadie da más por menos dinero, y tampoco parece que a corto o medio plazo vaya a hacerlo porque en ese sentido es (casi) insuperable.
Sí, es verdad que su calidad de rodadura no es la mejor. O que su pantalla va lenta. O que no sea el modelo más eficiente de su categoría, ni de lejos. Pero te lleva de un sitio a otro de manera cómoda, con unos acabados y un equipamiento razonablemente buenos y hay espacio para el día a día y algo más. Y todo ello, a cambio de una cantidad de dinero ridícula en comparación con otras alternativas.
Ficha técnica del MG ZS 1.0 T-GDi manual Luxury | ||
Motor | Cilindrada | 999 cc |
Cilindros | 3 en línea | |
Potencia máxima | 111 CV / 5.200 rpm | |
Par máximo | 160 Nm / 1.800 - 4.700 rpm | |
Alimentación | Tipo | Inyección directa Turbo |
Transmisión | Caja de Cambios | Manual, 6 marchas |
Tracción | Delantera | |
Suspensión | Delantera | McPherson Resorte helicoidal Barra estabilizadora |
Trasera | Rueda tirada con elemento torsional Resorte helicoidal Barra estabilizadora |
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Frenos | Delanteros | Discos ventilados |
Traseros | Discos ventilados | |
Dimensiones | Longitud | 4.323 mm |
Anchura | 1.809 mm | |
Altura | 1.653 mm | |
Distancia entre ejes | 2.581 mm | |
Maletero | Volumen | 448 litros |
Peso | Peso | 1.259 kg |
Prestaciones | Velocidad máxima | 180 km/h |
Aceleración 0-100 Km/h | 11,2 segundos | |
Consumo (WLTP) |
Combinado | 6,6 l/100km |
Velocidad baja | 7,3 l/100km | |
Velocidad media | 5,9 l/100km | |
Velocidad alta | 5,6 l/100km | |
Velocidad muy alta | 7,6 l/100km | |
Emisiones | Emisiones de CO2 | 149 gr/km - Etiqueta C |
Precio | Precio oficial | 20.690 euros |
Imágenes: Luis Miguel Martín (Auto Bild) y MG