La mayor reunión de coches patrulla Porsche del mundo tuvo lugar a comienzos de este mes en Holanda, un evento que atrajo a multitud de propietarios particulares de vehículos policiales de la Rijkspolitie. La policía estatal holandesa adquirió entre 1962 y 1996 un total de 507 modelos de Porsche para su utilización en la unidad de tráfico y ahora muchos de estos vehículos han pasado a manos privadas.
Con el apoyo del Porsche Classic Center Gelderland y de Porsche Netherlands, han organizado un evento al que han acudido decenas de coches patrulla Porsche de la Rijkspolitie, incluido un ejemplar del Porsche 918 Spyder vinilado para la ocasión con los colores oficiales de sus vehículos. La ausencia de límites de velocidad en las autopistas holandesas en la década de 1960 llevó a las autoridades a buscar una flota de modelos capaces de alcanzar altas velocidades.
Tenían que ser automóviles fiables, ágiles, con gran capacidad de frenada y descapotables. Sí, descapotables porque a diferencia de lo que sucede en otros países, la Rijkspolitie utiliza los cabrios para ponerse de pie sobre ellos y dirigir así el tráfico, con mejor visibilidad y más seguridad.
Te interesa: los mejores coches de Policía del mundo
Así que no tardaron mucho en darse cuenta de que su mejor candidato era el Porsche 356, que entró a formar parte de su flota de coches patrulla con su ahora icónica decoración y una única luz azul sobre el pilar A. La policía de estatal holandesa no dio el salto al Porsche 911 hasta que Porsche lanzó el 911 Targa en 1967. En total, han tenido más de 500 ejemplares de modelos de Porsche, incluyendo modelos como los mencionados 356 y 911 Targa, pero también unidades del Porsche 914 o del Porsche 924.
