Spania GTA tenía grandes planes para el GTA Spano, pero las cosas no salieron como habían previsto. De la tirada inicial de 99 ejemplares sólo consiguieron dar forma a doce unidades: diez de la primera generación y dos de la segunda. Precisamente, el único superviviente de la última serie está a la venta: en febrero saldrá a subasta el último GTA Spano de segunda generación que existe.
Corría el año 1994 cuando Domingo Ochoa fundó Spania GTA, la empresa que diseñaría el hipercar español GTA Spano: su desarrollo empezó en 2007 y dos años después un modelo de preproducción fue presentado a un pequeño grupo de clientes. El debut a nivel mundial se produjo en el Salón del Automóvil de Ginebra 2011 y en 2013 arrancó la producción en serie.
Un hipercar español
El GTA Spano tenía un chasis de fibra de carbono, Kevlar (los mismos materiales empleados en la carrocería), grafeno y titanio: un conjunto con el que crearon una estructura monocasco rígida con un techo de vidrio que se podía ajustar electrónicamente para gestionar la cantidad de luz que entraba al interior. Éste estaba revestido en fibra de carbono y cuero, contaba con un panel de instrumentos LCD personalizable y una pantalla de siete pulgadas que integraba el sistema de navegación, el de sonido…
Estaba impulsado por un V10 de 8.3 litros atmosférico fabricado por Ilmor Engineering en Michigan (Estados Unidos), que entregaba una potencia de 925 CV y 1.288 Nm de par máximo. La caja de cambios automática de siete relaciones fue cosa de CIMA. El bloque, el mismo que montaba el Dodge Viper, fue modificado pata la ocasión con un par de turbos, cámaras de combustión rediseñadas, válvulas de titanio, cárter seco y cigüeñal forjado. El sistema de frenado de AP Racing tenía discos ventilados carbocerámicos de 380 milímetros de diámetro con pinzas de seis pistones.
De 99 a 12 unidades
El objetivo de Spania GTA era producir 99 unidades del GTA Spano, pero sólo dieron forma a doce. Diez de ellos formaron parte de la primera generación: seis llevaban el motor del que os hemos hablado y otros cuatro un 8.4 biturbo. Dos se destruyeron en pruebas de impacto, cuatro se mandaron a Singapur, dos a China, uno a Estados Unidos y otro se usó en la película ‘Need for Speed’ para después ser subastado por 1,32 millones de euros.
Los dos ejemplares de la segunda generación contaban con un V10 de 7.9 litros biturbo: uno fue destruido en el proceso de homologación y el único que queda con vida es el que se subastará en París dentro de un mes.
Este GTA Spano era blanco, el color empleado en su presentación en Ginebra, pero ahora es gris mate con detalles en rojo y plata. Ha recorrido 8.500 kilómetros en pruebas, exposiciones y en la serie ‘Ballers’ de HBO, donde John David Washington fue el encargado de ponerse al volante. Es propiedad de un coleccionista español que, ahora, lo ha puesto a la venta a través de RM Sotheby's. No se han hecho estimaciones del precio que puede alcanzar, pero teniendo en cuenta la cifra que se pagó por la unidad de ‘Need for Speed’ podemos hacernos una idea.