El creador de vehículos tan emblemáticos como el BMW Z8, los Aston Martin DB9 y V8 Vantage y el híbrido Fisker Karma, ha presentado en el Concurso de Elegancia de Amelia Island, celebrado este pasado fin de semana, el prototipo Thunderbolt, la reinterpretación de Henrik Fisker del Aston Martin V12 Vanquish.
Su base en el modelo de Aston Martin está presente, pero ha sido rebajado en 15 mm y dotado de llantas de aleación de 21 pulgadas con neumáticos de alto rendimiento. La carrocería de fibra de carbono rediseñada, la parrilla delantera ampliada, el techo de cristal con un grado de inclinación mayor sobre la luneta trasera y el spoiler integrado en el portón del maletero representan los cambios más significativos. Otras modificaciones notables son las luces traseras rediseñadas de tipo LED y las tomas de aire triangulares.
En el interior, el Thunderbolt Concept recibe a los ocupantes con la pantalla curva de 11,6 pulgadas y alta resolución firmada por Panasonic, la cual surge como resultado de la unión para investigación de ambas compañías. Otra de las asociaciones ha permitido la incorporación de un reloj suizo Skeleton de Maurice Lacroix y las superficies de cuero especialmente recortado por el fabricante de muebles italiano Natuzzi. El último de los detalles que llaman la atención en el habitáculo es el soporte para botellas de vino o champán, una primicia en el sector de los coupé deportivos.
Aunque el Thunderbolt no llegará a comercializarse, un reducido número de unidades se podrán desarrollar bajo pedido especial, disponible exclusivamente a través de Galpin Aston Martin, pero contarán con un frontal renovado, una nueva parrilla y un sistema de infoentretenimiento que sustituirá a la pantalla de Panasonic.
