Es habitual cuando conducimos en invierno que se empañen los cristales del coche, lo cual puede ser muy peligroso. Es un fenómeno que se produce por el contraste de temperatura entre el exterior y le interior del vehículo. Es una situación muy molesta que dificulta la conducción, por ello, a continuación, te explicamos cómo impedir que se empañe la luna del coche en invierno.
Conducir con los cristales empañados es muy peligroso, tanto para ti como para el resto de los usuarios de la vía y los peatones, ya que reduce considerablemente la visibilidad y puede causar accidentes. El vaho es un exceso de humedad y aparece debido a la condensación. Se produce porque hay una diferencia de temperatura entre el frío del exterior y el calor dentro del coche, lo que provoca la aparición de vapor de agua que se acumula en los cristales y por eso se empañan.
Cómo impedir que se empañe la luna del coche en invierno
Para impedir que se empañe la luna del coche, hay que ajustar la temperatura. Los coches actuales disponen de varios medios para hacerlo, pero si tu vehículo ya tiene muchos años, será un poco más complicado. Si tu coche tiene climatizador, bastará con ponerlo a una temperatura entre 21 y 23 grados. Además, los coches actuales tienen una función antivaho que, pulsando un botón, consigue desempañar las lunas en segundos.
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Si tu coche no tiene climatizador, puedes activar la calefacción para eliminar el exceso de humedad y desempañar le cristal. Esto, impedirá que aparezca el vaho. También puedes poner el aire acondicionado, aunque tarda un poco más que eliminar el vaho y, cuando lo quites, los cristales se volverán a empañar.
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Todos estos métodos son, más o menos, conocidos. El problema es que, conducir con el climatizador o el aire acondicionado/calefacción encendidos suponen un incremento del consumo de combustible. Sin embargo, hay una manera de impedir que se empañe la luna del coche en invierno sin aumentar el consumo. Como explica en el vídeo de Instagram de arriba, basta con activar la función que permite la entrada de aire del exterior, sin encender el aire acondicionado.
Ese aire que entra en el habitáculo desde el exterior ya es frío e impide que se forme el vaho en los cristales. De esta manera, conducirás con buena visibilidad y ahorrarás en combustible. Por último, a modo de consejo, nunca quites el vaho con la mano o un paño, ya que el efecto será muy efímero y sólo conseguirás ensuciar el cristal.
