Toda la tecnología que se encuentra detrás del coche eléctrico está en constante evolución, con investigaciones que tratan de desarrollar nuevas soluciones y avances técnicos revolucionarios que ayuden a mejorar la eficiencia y prestaciones de estos vehículos. Un estudio reciente ha demostrado que los cangrejos podrían ser clave para desarrollar una nueva generación de baterías recargables para coches eléctricos e híbridos.
Un grupo de investigadores ha decidido reciclar los caparazones de estos crustáceos en materiales porosos llenos de carbono que tienen una amplia variedad de usos. Entre ellos, que pueden servir para crear materiales de ánodo para baterías de iones de sodio, una alternativa prometedora a las actuales baterías de iones de litio que se usan en la industria del automóvil, según informa la American Chemical Society (ACS).
Los cangrejos podría ser clave para desarrollar una nueva generación de baterías

La necesidad de buscar una alternativa a las baterías de litio se debe a que este elemento es finito. Esto anima a científicos de todo el mundo centrar la atención en sus “primos químicos”, como la batería de iones de zinc biodegradable que empleaba la quitina, un carbohidrato que forma parte del exoesqueleto de los cangrejos.
Estos caparazones se podrían convertir en carbono duro, un material que se ha explorado como un posible ánodo para baterías de iones de sodio. Combinado con materiales semiconductores metálicos, como los dicalcogenuros de metales de transición, puede convertirse en un ánodo de batería factible.
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Un grupo de investigadores chinos han investigado como el sulfuro de estaño y sulfuro de hierro podrían combinarse con carbono duro hecho de caparazones de cangrejo para crear un ánodo de batería de iones de sodio que sea viable.
Para lograrlo, estos científicos calentaron los caparazones de cangrejo a temperaturas superiores a los 1000 ºF (537,7 ºC) y agregaron el carbón a una solución de sulfuro de estaño y sulfuro de hierro para formar ánodos. La estructura fibrosa y porosa del carbón de cangrejo proporcionó una gran superficie, lo que mejoró la conductividad del material y la capacidad de transportar iones de manera eficiente.
Los investigadores probaron este nuevo material en una batería prototipo y descubrieron que ambos compuestos tenían buenas capacidad y podían durar al menos 200 ciclos de carga y descarga. Según los científicos, este trabajo podría proporcionar una hoja de ruta para reciclar otros desechos y desarrollar tecnologías de baterías más sostenibles.