El M2 CS es la versión de calle más radical del Serie 2 (para competir ya está el BMW M2 CS Racing), pero para algunos preparadores no lo es lo suficiente. Esto lleva a que “metan mano” en el deportivo y creen vehículos como el MH2 GTR, nombre oficial del BMW M2 CS de Manhart.

PRUEBA: BMW M2 CS

La compañía ha creado una obra similar a lo que nos tiene acostumbrados: más músculo visual, más músculo bajo el capó y complementos para conseguir mejorar su comportamiento.

BMW M2 CS Manhart

Lo primero salta a la vista, y es que el BMW luce una imagen extrema. Su imponente frontal en realidad es de serie, pero gana presencia debido a los pasos de rueda ensanchados. A esto también ayuda el voluminoso alerón trasero, de fibra de carbono, material presente además en los paragolpes. El toque final lo ponen las llantas forjadas de gran diámetro, que van envueltas en neumáticos Michelin Pilot Sport Cup 2 de 255/30 en el eje delantero y de 295/25 en el trasero.

Por llamativo que resulte, lo que realmente importa se encuentra escondido. Bajo el capó esconde el mismo motor 3.0 biturbo de seis cilindros en línea que monta de fábrica, pero en lugar de los 450 CV y 550 Nm que rinde de serie, está potenciado hasta los 600 CV y los 830 Nm de par máximo. El aumento se ha conseguido gracias a un sistema de admisión de carbono y a los nuevos turbos e intercooler. No hay duda de que el aumento de rendimiento se traducirá en una mejora de las prestaciones, pero no se han facilitado datos concretos.

BMW M2 CS Manhart

Por último, también monta un nuevo sistema de escape de acero inoxidable y cuenta con un kit de suspensión deportiva modificado que ha sido desarrollado en colaboración con H&R.

El kit de transformación completo para convertir el deportivo en el BMW M2 CS de Manhart cuesta 18.907 euros.

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