Ya en 2015 supimos que Audi se había asociado con Sunfire para crear en Dresde, Alemania, un combustible sintético a base de agua y aire denominado e-diésel. Ahora, con dos nuevos socios, Audi producirá 400.000 litros al año de diésel sintético a partir de los mismos elementos, aunque la actividad se centrará en una región de Suiza y se emplearán unas tecnologías diferentes con el fin de buscar nuevas soluciones a su producción.
Para ello, Audi se ha asociado a dos nuevas compañías, Ineratec y Energiedienst, para construir una planta piloto en Laufenburg, Suiza, donde tratarán de investigar y producir e-diesel. Este combustible sintético tiene unas emisiones “casi neutrales” y su producción será suministrada por energía hidroeléctrica. La planta suiza, para la cual Audi presentará una solicitud de instalación en unas semanas, comenzará a construirse a principios de 2018 y tendrá una capacidad aproximada de 400.000 litros anuales.
La planta se encargará de convertir el excedente de energía hidroeléctrica en e-diésel a través de un proceso químico denominado electrólisis. Este proceso permite generar energía verde en la central hidroeléctrica mediante hidrógeno y oxígeno de agua. Una “tecnología de microprocesos”, como lo define Audi, permite que el hidrógeno reacciones con el CO2 y se formen compuestos de hidrocarburos de cadena larga. El resultado de este proceso permite la obtención de combustible sintético y de ceras que se emplean en otras áreas de la industria.
Por otro lado, la compañía de los cuatro aros está inmersa en otros proyectos mediante los cuales pretende obtener e-gasolina y e-gas. Además de la planta en Dresde junto a Sunfire, en la que obtienen e-diesel pero empleando otras tecnologías, Audi cuenta con su propia instalación de gas en Werlte, Alemania, que fabrica e-gas (metano sintético) para los modelos Audi A3, Audi A4 (prueba) y Audi A5 de la gama e-tron. En cuanto a la creación de e-gasolina, la marca está asociada a otras compañías con las que ya ha iniciado una investigación.
Fuente: El Economista