La lista de novedades del Salón de Tokio 2019 no deja de crecer: se ha presentado el Alpina B3 Sedán 2020, variante el formato berlina del modelo, que ya hace un tiempo vio la luz en el familiar Touring y con el que comparte prácticamente todas sus mejoras, tanto de imagen como mecánicas.
Alpina B3 Touring: el M3 familiar que BMW no va a fabricar
La compañía le ha dado su propia estética, de corte deportivo, pero bastante sutil, gracias a detalles como un kit de carrocería específico, la instalación de dos salidas de escape dobles y las llantas forjadas de 20 pulgadas (se quedan en 19 si se opta por calzar neumáticos de invierno). Además, el hecho de que solo pueda ir pintado en dos colores exclusivos (Alpina Blue Metallic o Alpina Green Metallic) contribuye a distinguirle todavía más.
En el interior unas placas de metal dan la bienvenida en el umbral de las puertas, otra identificativa está situada junto a la palanca de cambios, el volante de cuero está cosido a mano y tanto para la tapicería de los asientos como para las molduras de salpicadero y puertas la firma ofrece bastante opciones de personalización.
Los más interesante del Alpina B3 Sedán 2020 es, sin embargo, su mecánica. Emplea un propulsor 3.0 biturbo de seis cilindros en línea que entrega 462 CV y 700 Nm de par máximo. Cuenta con una caja de cambios ZF automática de ocho velocidades y con la tracción integral xDrive equipada con un diferencial trasero de deslizamiento limitado.
La suspensión tiene una puesta a punto específica, recibe componentes nuevos como amortiguadores adaptativos, muelles Eibach y barras estabilizadoras más grandes; y tiene tres modos de funcionamiento (Comfort+, Comfort y Sport). Además, el modo Sport+ establece parámetros que afectan a la distribución de par, a la caja de cambios y a la dirección deportiva.
Gracias a todo ello el BMW es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 3,8 segundos (una décima más rápido que el Touring), de 0 a 200 km/h en 13,4 y de conseguir una velocidad punta de 303 km/h.