Es habitual que te hablemos de coches abandonados que son hallados en todo tipo de lugares extraños, no sólo graneros o garajes, sino también en el fondo de un lago o de un río. Pero no es tan habitual que alguien encuentre toda una colección de vehículos apilados en un recinto. Este último ha sido el caso del vendedor de coches GiveMeTheVin.com (GMTV), quien ha encontrado 23 coches clásicos abandonados en un almacén y casi sin uso.
El hallazgo se ha producido en Birmingham, Alabama (Estados Unidos), y consiste en 23 vehículos, muchos de esos con un kilometraje muy bajo y algunos, incluso, sin estrenar. La colección perteneció a Earl Trammell, una figura del negocio automovilístico de Alabama y apasionado coleccionista de coches que falleció el año pasado. Su exmujer, Patricia, heredó la colección y la vendió a GMTV, que tiene previsto subastarla en primavera de 2024.
Encuentran 23 coches clásicos abandonados en un almacén y casi sin usar
Entre los 23 coches clásicos abandonados, encontramos joyas como un Chevrolet 1500 454 SS de 1990, una espectacular pick-up con un potente bloque V8, y que apenas tiene 30 kilómetros recorridos, o sea que no se ha usado apenas. También hay un Chevrolet Corvette ZR1 de 1990 con sólo 40 kilómetros, un Corvette 35 Aniversario de 1988 con 30 kilómetros y un Stingray Coupe de 1979 con 74 kilómetros.
Además de otros Corvette, en la colección figuran un Deville Coupe de 1963 y un Convertible Indy Pace Car de 1998, que es el coche de menos edad. También un Buick Grand National de 1987, un Porsche Carrera 4S de 1996 con 965 kilómetros, un Lincoln Continental Mark IV de 1973 y un Chevrolet 210 sedán de 1956.
El escaso kilometraje de muchos de los coches no es casual. Trammel coleccionó todos esos coches como una manera de invertir mucho más segura que en fondos de inversión. Según cuenta John Hollander, cuñado de Trammel “estos coches empezaron a acumularse gracias al amor de Earl Trammel por los coches. Tenía dos talleres distintos en Birmingham y empezó a coleccionar coches a una edad temprana. Estos coches necesitan estar fuera, donde la gente pueda verlos, así que finalmente convencí a mi hermana para que vendiera todo el inventario."
