Posiblemente conozcas Brabus y al pensar en él, te venga ala cabeza una de sus innumerables preparaciones, por norma general con Mercedes como marca fetiche. Lo que seguramente no sepas es que el año pasado la compañía germana firmó un acuerdo con un fabricante chino, Wey, que es la firma especializada en coches de lujo del gigante asiático Great Wall. ¿El objetivo de dicha unión? Crear versiones especiales, de corte premium, y la primera ha sido el Wey VV7 GT.
Brabus Electric, el Mercedes EQC más radical
El modelo base es un SUV de corte coupé que se lanzó al mercado en 2017 y que, a su vez, deriva del Haval 6. Brabus le ha dado su toque para crear el acabado tope de gama, que le da un toque más deportivo.
Esta variante cuenta con paragolpes específicos, tanto el delantero como el trasero; tiene pasos de rueda ensanchados, calza nuevas llantas de 21 pulgadas de diámetro, y centra el resto de cambios en la zaga, donde hace acto de aparición un nuevo difusor, un sistema de escape con colas de mayor tamaño y unos grupos ópticos con tecnología LED.
El fabricante asegura que también hay novedades en el interior, pero ni las detalla ni ha facilitado imágenes en las que puede apreciarse el trabajo realizado por Brabus.
Brabus 800 Adventure XLP, un Clase G pick-up
En el apartado en el que, por desgracia, el preparador no ha metido mano es en el mecánico, que continúa utilizando el mismo propulsor del modelo base: un bloque gasolina 2.0 turbo de 227 CV y 387 Nm de par máximo, combinado con una caja de cambios automática de siete velocidades y con un sistema de tracción delantera. En la gama normal también hay una opción híbrida enchufable, pero no se ha mencionado que vaya a estar disponible en el Wey VV7 GT.
Su precio es de 191.800 yuanes, lo que al cambio actual suponen algo menos de 25.000 euros.