Mitsubishi fue protagonista en los rallyes de los 90, de la mano de Tommi Mäkinen y el mítico Lancer EVO en sus diferentes generaciones. Pero la participación de la marca japonesa en el mundo de los rallyes empezó mucho antes, en los años 70, donde otro Lancer fue capaz de ganar el rally más duro de entonces, el Rally Safari, hasta en tres ocasiones. Ahora sale a la venta esta réplica del Mitsubishi Lancer GSR Rally Safari de 1977.
En 1976, cuatro Mitsubishi Lancer GSR terminaron el exigente Rally Safari en primera, segunda, tercera y sexta posición, lo que reportó un extraordinario éxito a la marca japonesa, que demostró su capacidad para hacer coches fiables, derrotando rivales como Porsche, Lancia, Fiat o Mercedes. La victoria en el rally de Kenia se prolongó dos temporadas más.
A la venta un Mitsubishi Lancer GSR Rally Safari de 1977
Desde entonces, el Lancer GSR Rally Safari está considerado como un icono de Mitsubishi y es muy apreciado por los aficionados a los rallyes. Un coche simple, pero con un rendimiento extraordinario.
La unidad a la venta en Classic Driver fue adquirida por su propietario actual en 2015 y se corresponde con la versión del Rally Safari y no con una de las 13 unidades que se importaron a Europa. La diferencia entre la versión europea y la original está en el motor 4G32 1.6 litros OHC con doble carburador Mikuni 32 & 28 DID SA, de 105 CV, combinado con una caja de cambios de cinco velocidades. Además, cuenta con un cuentarrevoluciones específico, un volante deportivo, rejillas en el capó y las insignias GSR.
El coche tiene 35.648 kilómetros y solo ha estado en la carretera unos años antes de acabar en una sala de exposición. Tras comprarlo en 2015, en Bélgica, el propietario lo reconstruyó por completo, de acuerdo con las especificaciones de la época, como una réplica del modelo Safari de Andrew Cowan, el fundador de Ralliart Mitsubishi Motorsport. La única excepción es la jaula antivuelco, que no es una simple jaula atornillada como entonces, sino que está completamente soldada para cumplir con la normativa de seguridad de la FIA para participar en el rally histórico.
El coche incluye amortiguadores de rally ajustables Koni, un sistema de frenos renovado, llantas de 13 pulgas más un juego con diez ruedas y piezas de repuesto.