Más de 1.100 CV en la versión de carreras y 950 CV en la de calle, esa es la… potencia de las dos variantes del nuevo Shelby 1000 2012, un brutal Ford Mustang 2012 potenciado hasta el límite. ¿Te acuerdas del Chevrolet Camaro Copo? Pues con este Shelby podrías ‘destrozar’ al Camaro en una carrera de cuarto de milla y además, volver a casa por la carretera como en cualquier otro coche de calle.
El nuevo Shelby 1000 2012 es el modelo más potente jamás fabricado por la marca (Historia Ford Mustang). Caroll Shelby, padre de la criatura, pensó que los 800 CV que desarrollaba el Shelby Mustang GT500 Super Snake no eran suficientes y por eso se ha decidido a lanzar al mercado una versión aún más potente y exclusiva. Estará disponible con dos niveles de potencia diferentes: más de 1.100 CV para el modelo de carreras y 950 CV para la versión matriculable.
¿Cómo han logrado tantos caballos? Para potenciar el Shelby Mustang 1000 han optado por el camino difícil, modificando todos los componentes internos de la mecánica V8 de 5,4 litros con pistones y bielas forjadas, un cigüeñal específico, conductos de admisión optimizados o un compresor sobredimensionado –se puede elegir entre un Kenne Bell de 3,7 litos o un Whipple de 4-.
Para el sistema de escape, que mejor que contar con la colaboración de Borla, uno de los especialistas del sector, que ha instalado una línea de escape de aspecto similar al del modelo de serie. Y hablando de especialistas, los chicos de Tremec han sido los encargados de desarrollar la transmisión, tarea nada sencilla teniendo en cuenta que tiene que lidiar con auténticos torrentes de potencia provenientes del poderoso V8 y además, ser utilizable a diario.
Los responsables del desarrollo del Shelby 1000 2012 han querido ofrecer un producto perfecto, en el que no sea necesario modificar nada para tener ‘lo más de lo más’. Sólo se fabricarán 100 unidades de este modelo, con un precio de 113.000 euros más el coste del Mustang GT500 en el que se basa. En total, cuesta algo más de 150.000 euros, nada mal para un coche que ofrece unas prestaciones iguales o mejores que la de modelos que llegan a costar dos o tres veces más.