Con más de seis millones de unidades vendidas desde la aparición de la primera generación en 1984, el utilitario de SEAT no solo se ha consagrado como un superventas sino que además ha logrado conquistar el corazón de muchos conductores. El de la prueba, el SEAT Ibiza 1.5 TSI FR XL, es la máxima expresión de la evolución que ha experimentado el modelo desde su lanzamiento hace casi cuatro décadas.
Un coche que, con su motor 1.5 TSI de 150 CV y su cambio DSG de siete velocidades, es válido para todo. Porque se siente igual de cómodo rodando en ciudad, donde agradecerás sus dimensiones compactas, que afrontando largos viajes por carretera. Escenarios en los que se desenvuelve francamente bien gracias precisamente a esa combinación entre propulsor y transmisión.
La Historia del SEAT Ibiza: la clave del éxito de un modelo longevo
Y todo esto combinado con las novedades que introdujo la marca con la última actualización del SEAT Ibiza. Una renovación que afectó fundamentalmente a su habitáculo, que aunque no parezca muy significativo, se nota mucho porque es el lugar en el que te sientas cuando usas el coche.
Un utilitario convincente con tintes deportivos

Por fuera, este SEAT Ibiza 1.5 TSI FR XL aporta toques de tinte deportivo frente a sus hermanos de gama sin apellido FR. Cambia el diseño de la parrilla, de las rejillas de las entradas de aire inferiores del paragolpes delantero y del parachoques posterior, que incluye unas salidas de escape -falsas, eso sí- con un acabado cromado. También incorpora de serie unos faros y pilotos de ledes, una suspensión deportiva FR o unas llantas de aleación ligera de 17”.
La unidad de la prueba monta eso sí las opcionales Performance de 18”, que suponen un sobrecoste de 478 euros. Y que se combinan con las pinzas de freno acabadas en rojo, otro extra -de 457 euros- que añade también detalles en rojo en los cinturones de seguridad. Otro elemento opcional que puedes ver en el coche de las imágenes es el techo solar panorámico practicable, que tiene un precio de 915 euros.

En el habitáculo me encuentro con el rediseñado salpicadero, que transmite una mayor sensación de calidad y solidez, con materiales agradables al tacto. Las salidas de aire, que también son nuevas, tienen detalles en rojo y están iluminadas, mientras que el volante proviene directamente de su hermano mayor, el SEAT León.
Hay dos aspectos del interior de este SEAT Ibiza que quiero destacar. El primero es el hecho de que mantenga un climatizador con mandos físicos, que facilita enormemente una tarea tan simple como variar la temperatura sin apartar la vista de la carretera. La segunda es su sistema multimedia, que no solo tiene una pantalla flotante grande (9,2”), es que tiene muy buena respuesta y es compatible de manera inalámbrica con Android Auto y Apple CarPlay.

El SEAT Ibiza 1.5 TSI FR XL de la prueba equipa también la tapicería FR opcional (478 euros), con un acabado muy atractivo que combina cuero, Alcantara y costuras en rojo a modo de contraste. También dispone del paquete de invierno, que suma por 416 euros la calefacción de asientos delanteros o el ajuste de altura para el acompañante, entre otros.
La habitabilidad es buena para el tamaño del coche. Delante está muy bien, detrás es más justo pero ofrece espacio suficiente para que dos adultos viajen con un buen nivel de confort. El maletero, con 355 litros de capacidad, es amplio y cuenta con un piso regulable en dos alturas que aporta versatilidad.
150 CV y 250 Nm para el Ibiza más potente

Progresividad. Eso es lo que diría si me pidieran que definiera el motor el 1.5 TSI de este SEAT Ibiza con una única palabra. Porque estamos ante un propulsor increíblemente elástico que tiene una entrega de potencia muy lineal. Tanto es así que puede dar la sensación de que empuja menos de lo que indican sus números de prestaciones.
Esto se debe a que entrega todo su par motor desde muy abajo, casi desde el ralentí. También porque, a diferencia de otras mecánicas turboalimentadas, no encontramos esa típica patada al llegar a cierto régimen de giro. Y además, como viene ligado a un cambio DSG de siete marchas, la transmisión disipa las pequeñas carencias que pueda tener el motor con unas transiciones rapidísimas.

Estamos hablando de una motorización que entrega 150 CV entre 5.000 y 6.000 vueltas y 250 Nm de par entre 1.500 y 3.500 rpm. Unas cifras que convierten a este SEAT Ibiza 1.5 TSI FR en el Ibiza más potente de la actual generación del modelo. Y permiten que acelere de 0 a 100 km/h en 8,2 segundos y que alcance una velocidad punta de 216 km/h.
Gracias a que el peso del conjunto es contenido (menos de 1.200 kg en orden de marcha), la agilidad es notable. Esto se nota no solo a la hora de acelerar, también cuando toca frenar, cambiar de dirección o incluso cuando llega el momento de pasar por la gasolinera. Porque gracias a ese cambio DSG y a medidas como la desactivación de cilindros, este Ibiza logra sin dificultad gastos inferiores a los 6,5 l/100km.

El peso del conjunto también influye en la capacidad que tiene la suspensión de filtrar las irregularidades de la calzada. Porque al no tener que lidiar con grandes inercias, ofrece mayor capacidad de absorción de lo que esperas. Sobre todo cuando sabes de antemano que la amortiguación específica FR es un 20% más enérgica.
SEAT Ibiza 1.5 TSI FR XL, válido para todo
Es un coche muy agradable de conducir porque tiene un interior bien resuelto y por la respuesta del conjunto motor/cambio. Se desenvuelve muy bien en entornos urbanos y no tiene ningún problema en enfrentarse a vías rápidas, donde saca a relucir esos 150 CV con unas prestaciones suficientes para cualquier situación. Y su dotación tecnológica también es extensa, lo que contribuye a mejorar ese confort de a bordo en el día a día.

Lo que me ha sorprendido ha sido su precio, pues la unidad probada, con todas las opciones, pasa de los 29.000 euros sin descuentos. Es una suma muy elevada, tanto que supera incluso el coste de tarifa de numerosas versiones de su hermano mayor, el León.
Ficha técnica SEAT Ibiza 1.5 TSI FR XL DSG
|
Motor |
Cilindrada |
1.498 cc |
Cilindros |
4 en línea |
Potencia máxima |
150 CV / 5.000 – 6.000 rpm |
Par máximo |
250 Nm / 1.500 – 3.500 rpm |
Transmisión |
Caja de cambios |
Automática, 7 velocidades |
Tracción |
Delantera |
Suspensión |
Delantera |
Paralelogramo deformable / Resorte helicoidal / Barra estabilizadora |
Trasera |
Eje torsional / Resorte helicoidal |
Dimensiones |
Longitud |
4.059 mm |
Anchura |
1.780 mm |
Altura |
1.447 mm |
Distancia entre ejes |
2.564 mm |
Alimentación |
Tipo de alimentación |
Inyección directa, turbo e intercooler |
Peso |
Peso |
1.166 kg |
Prestaciones |
Velocidad máxima |
216 km/h |
Aceleración 0-100 Km/h |
8,2 seg |
Consumos WLTP |
Combinado |
5,7 l/100 km |
Velocidad baja |
7,4 l/100 km |
Velocidad media |
5,5 l/100 km |
Velocidad alta |
5,0 l/100 km |
Velocidad muy alta |
5,8 l/100 km |
Emisiones WLTP |
Emisión CO2 |
129 g/km Euro 6 – Etiqueta C |
Precio |
Precio oficial |
25.769 euros |