A priori el Volkswagen ID. Buzz no es un vehículo que sea muy susceptible de ser tuneado, básicamente porque hablamos de una furgoneta y, para más inri, eléctrica. Sin embargo, los preparadores son capaces de darle un toque callejero hasta a un vehículo como este y en esta ocasión quien se ha animado a ello ha sido Prior Design.
Mantiene el característico acabado bitono de la carrocería, pero la parrilla, que en el modelo de serie es del color de la parte inferior, aquí es como la superior, lo que hace que destaque más.
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También se han modificado tanto los paragolpes como los faldones laterales, que ahora cuentan con extensiones, suman un pequeño labio en la parte delantera y se ha instalado un pequeño difusor en la trasera. Contribuyen a dar la sensación de que la Volkswagen está más pegada al suelo, algo que es una realidad, puesto que se ha rebajado la suspensión.
El elemento más llamativo de todo el conjunto son las llantas, de dimensiones considerables y, sobre todo, con un diseño prácticamente carenado al completo que destaca bastante, además de cumplir funciones aerodinámicas para ayudar a alargar la autonomía en la medida de lo posible.
La guinda la pone el pequeño alerón trasero, además de la sutil modificación de los grupos ópticos de la zaga, que ahora están enmarcados por unas molduras metalizadas.
Se trata de un kit meramente estético, sin cambios en el apartado mecánico, que sigue estando formado por un motor de 204 CV y una batería de 77 kWh de capacidad, que le otorga una autonomía de 418 kilómetros. Es compatible con estaciones de carga rápida en corriente continua de hasta 170 kW de potencia.
Por el momento todas estas modificaciones para el Volkswagen ID. Buzz son meramente conceptuales, pero Prior Design las ha hecho públicas para comprobar la respuesta de sus seguidores y así decidir si llevarlas a producción o no.