La historia del Porsche 911 es larga, dilatada y con una cantidad enorme de generaciones y variantes. Muchas versiones entre las que elegir, pero entre todas ellas, tanto las buenas como las malas, esta que os traemos hoy posiblemente sea de las más peculiares. Se trata del Porsche 911 diseñado por Bertone, una unidad que puede que ostente el título de ser la más rara de la historia.
La génesis de este ‘nueveonce’ es de lo más curiosa. Corría 1965 y Porsche, tras el final de la producción de la primera generación del modelo, todavía no tenía en la segunda ninguna variante descapotable. Todavía quedaban algunos años para que viera la luz el 911 Targa que, a pesar de poder desmontar la parte central del techo, no terminaría por ser un descapotable al uso.
Sea como fuere, John von Neumann, propietario de un concesionario de la marca en California, quería un nuevo 911 roadster, dado que las unidades de la primera generación se habían vendido francamente bien. Como la compañía no estaba por la labor, decidió propiciar el nacimiento del modelo por cuenta propia.
Para ello se hizo con un chasis de Porsche 911 de fábrica y contactó directamente con Nuccio Bertone para que diseñara una carrocería completamente nueva para él. El resultado fue un vehículo de inconfundible estilo italiano pero que de Porsche tenía poco, apenas los logos de la casa alemana.
El siguiente paso era generar una demanda suficiente como para que la central diera luz verde a la producción en serie del proyecto. Para conseguirlo, se exhibió en el Salón de Ginebra de 1966… pero la jugada salió mal, sin recibir ni un solo pedido y quedándose el Porsche 911 Bertone en un único prototipo que Neumann se quedo para sí.
Pero el tiempo pasa y lo que a todas luces fue un fracaso, a día de hoy se ha convertido en una rareza automovilística, lo que suele significar cantidades ingentes de dinero. El ejemplar tras haber pasado por las manos de diversos coleccionistas, recibir las llantas de un 914-6 y el motor de un 911 S, va a ser subastado por Gooding & Company, que estima que la puja ganadora alcanzará un precio de entre 700.000 y un millón de dólares.
Fuente: Road&Track. Fotos: Mathieu Heurtault, Gooding & Company
