Estas patentes de Ford, enfocadas a los coches deportivos y de altas prestaciones, nos han dejado con una media sonrisa en la boca: todas ellas están pensadas para mejorar las prestaciones y el comportamiento dinámico de los vehículos más deportivos de Ford, muchas ellas desarrolladas por el departamento de Ford Performance, encargado de la puesta a punto de los modelos más salvajes de la casa del óvalo. Estas 7 patentes de coches deportivos de Ford ponen sobre la mesa un futuro interesante más allá de los coches eléctricos o los coches autónomos.
Aerodinámica activa en el capó
En esta patente podemos ver cómo unas trampillas situadas en la parte superior del capó se podrán abrir y cerrar según las necesidades de refrigeración con un objetivo secundario: mejorar el balance aerodinámico. Es decir, serán capaces de abrirse cuando el motor necesite un extra de aire, pero se cerraran cuando el balance aerodinámico pueda sufrir y siempre que el motor se encuentre en un estado óptimo de temperatura. El objetivo es mejorar la eficiencia y el coeficiente de penetración, optimizando la refrigeración del motor.
Refrigeración activa de los frenos
Mismo concepto, pero en este lugar, en los frenos. Ford propone unos conductos activos, capaces de abrirse y cerrarse en función de la necesidad de refrigeración de los frenos. Este sistema afecta menos a la aerodinámica, sino que el objetivo es tener un extra de aire fresco enfocado directamente a los frenos para que se enfríen de una manera más óptima en aquellas circunstancias especialmente duras, por ejemplo al bajar un puerto de montaña o en unas tandas en circuito.
Barra de torretas para motores sobrealimentados
Ford ha patentado un nuevo tipo de barra de torretas para mejorar la estabilidad y la rigidez torsional de sus deportivos, con un detalle muy interesante: su diseño permite alojar su supercargador de gran tamaño en el motor sin afectar al espacio. El diseño de estas barras prometen ligereza, rigidez, pero también una estructura especial para un mejor funcionamiento. Están ligeramente elevadas para permitir alojar un gran motor en su parte inferior: la verdad es que el dibujo tampoco ofrece la mejor perspectiva, pero la idea es buena. ¿Lo montará el nuevo y brutal Ford Mustang Shelby GT500 2019?
Capó con tomas de aire que protegen al motor de la lluvia
El agua no es algo que convenga a los motores o a la electrónica del vehículo. Es por eso que las tomas de aire en el motor siempre son pequeñas y protegidas de la lluvia. No obstante, entre las patentes de Ford encontramos una que es capaz de reconocer si llueve o no y modificar la apertura de la toma de aire en el capó. También incluye una bandeja para que el agua que entre no afecte al motor ni a ningún componente electrónico. Una solución que podría hacer que los capós en el futuro tengan gigantescas aperturas para mejorar la refrigeración del motor (o de las baterías).
Aerodinámica activa en los bajos del coche
Es importante canalizar el aire para mejorar la aerodinámica y el downforce en un coche deportivo. El aire es capaz de pegar el vehículo al suelo y mejorar su tracción. No obstante, siempre se puede mejorar: Ford propone un sistema aerodinámico activo en los bajos del coche, capaz de modificar ciertos elementos para mejorar el downforce y la resistencia aerodinámica durante la frenada y reducir el coeficiente de arrastre cuando se busca la máxima eficiencia.
Nuevos labios delanteros
Sin duda, la aerodinámica es clave a la hora de mejorar el comportamiento dinámico de los coches del futuro. Entre las patentes de Ford encontramos un labio aerodinámico delantero que no solamente mejorará el flujo aerodinámico y el downforce que se genera en el eje delantero sino que también se extiende por la parte lateral para mejorar la estabilidad en curvas con una gran ventaja: apenas afectará al coeficiente de arrastre, por lo que no afectará a la eficiencia.
Fotos: USPTO
