Con motivo de la cumbre Asia-Pacific Economic Corporation (APEC) de 2018, Papúa Nueva Guinea compró una flota de 40 Maserati Quattroporte, movimiento que fue cuestionado por el importante desembolso que supuso. Ahora, tres años después, los ofrece con descuento porque solo han conseguido vender dos unidades.
Hay que remontarse a 2018 para llegar al origen de esta historia. Se compraron los modelos de Maserati para transportar a dignatarios internacionales durante la mencionada cumbre, algo que generó mucho revuelo ya que Papúa Nueva Guinea es uno de los países más pobres de la APEC.
Se calcula que al menos el 40% de su población vive con menos de 1 dólar al día, lo que contrasta con las 500.000 kinas, es decir, algo más de 122.000 euros, que costó cada sedán italiano, siendo el montante total de 20 millones de kinas o, lo que es lo mismo, casi 4,9 millones de euros.
Desde el gobierno se apuntó a que, una vez finalizada la cumbre, los Maserati se venderían a particulares, con lo que se recuperaría la inversión, pero lo cierto es que tres años después solo se han vendido dos unidades de las cuarenta, llegando incluso a existir rumores sobre que el resto se habrían perdido.
Las autoridades han mostrado los ejemplares restantes a los periodistas y han anunciado que para venderlos los van a ofrecer a un precio más barato: por 400.000 kinas, algo menos de 98.000 euros.
Para más inri, en Papúa Nueva Guinea no hay concesionarios de Maserati, por lo que en 2018 se adquirieron en un concesionario de Sri Lanka y se llevaron al país en avión, lo que hace que el movimiento sea todavía más extraño.
De hecho, John Pundari, el ahora Ministro de Finanzas del país, ha admitido que: «si hubiéramos tenido alguna previsión, los Maseratis no se habrían comprado en primer lugar. Cometimos un terrible error. Si no existen distribuidores de Maserati en PNG, no hay razón para comprarlos”.
Fotografía: AirBridgeCargo Airlines
