El Opel Astra es, hoy en día, un modelo electrificado, parte del grupo Stellantis y con una versión 100% eléctrica en camino. Hace cuarto de siglo la cosa era muy distinta, el Opel Astra G, que cumple 25 años, fue la segunda generación del modelo y llegó con toda una serie de innovaciones interesantes.
Remontándonos un poco más atrás, en 1991 se lanzó el Astra original, un compacto que tenía la difícil tare de estar a la altura del éxito del Opel Kadett, modelo al que sustituía y algo que consiguió con creces. Seguir dicha estela fue el objetivo principal de la marca alemana, que se volcó con todo para llevar a cabo el desarrollo de un coche pionero.
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Una de las maneras que tuvo de hacerlo fue a nivel tecnológico. Para el diseño del vehículo utilizó ALIAS, un programa de diseño asistido por ordenador concebido originalmente para la animación en películas y que se empleó en Parque Jurásico.
El resultado fue una de las generaciones más reconocibles del modelo, con un diseño caracterizado por la pequeña parrilla de plástico delantera, marcados pasos de rueda o secciones de plástico negro en los bajos.

Cuando se lanzó en la primavera de 1998, el Opel estaba disponible como berlina de tres y cinco puertas y como familiar, a lo que más adelante se sumaron la berlina de cuatro puertas con portón trasero, el coupé, el vehículo comercial Astravan y el descapotable; una variedad de carrocerías realmente amplia.
Además, contó con varias innovaciones importantes, el hecho de ser el primer Opel con carrocería totalmente galvanizada, montar faros H7 transparentes con un 30 % más de potencia lumínica y contar con el chasis DSA (Dynamic Safety Action) que proporcionaba seguridad activa en la conducción.

En este aspecto se ahondó a partir de 1999 con la introducción del ESP y del sistema patentado de liberación del pedal, que protegía contra lesiones graves en los pies o las piernas en caso de impacto.
Otro punto reseñable es el carácter deportivo que tuvo en ciertas versiones, y es que paralelo a su desarrollo se creó el Opel Performance Center (OPC), del que en el mismo 1998 salió el Astra OPC de 160 CV y, cuatro años más tarde, una variante de 192 CV que alcanzaba velocidades de hasta 240 km/h.