Que a los amigos de lo ajeno no les importa adaptar sus objetivos con el fin de robar objetos que tengan un mayor valor es algo que hemos podido comprobar en los últimos años. Hemos visto como han pasado de robar llantas, asientos deportivos y faros, a catalizadores. Sin embargo, los coches eléctricos e híbridos enchufables empiezan a ser cada vez más frecuentes y ambos vehículos tienen algo que en común en lo que se han fijado los ladrones.
Las autoridades estadounidenses han detectado un incremento de los robos de cables de carga exteriores para vehículos enchufables. La mayoría de propietarios de este tipo de coches dejan cargando el vehículo durante la noche en las entradas a sus residencias y dado que en la mayoría de casos es tan fácil robar el cable de carga como desconectarlo del coche y del cargador, esto ha despertado cierto interés en los delincuentes.
Los ladrones tienen ahora un nuevo objetivo en los coches eléctricos

Según ha informado NBC4, un residente de Los Ángeles (California) se percató recientemente de que el cable de carga de su Audi e-tron (prueba) había desaparecido. Al revisar las cámaras de vigilancia, el propietario se percató de que un hombre enmascarado con una sudadera con capucha desconectó el cable y se lo llevó en una bicicleta a las 5:22 de la madrugada.
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La víctima del robo informó que el coste de reemplazar el cable de carga de la estación externa le costó 2.700 dólares (2.415 euros), aunque hay opciones mucho más económicas dependiendo de la marca, el tipo de vehículo y la velocidad de carga.
Este es solo uno de los numerosos casos de robos de cables de carga para coches eléctricos e híbridos enchufables que se han registrado en los últimos meses. También se han dado casos en el Reino Unido. Otro residente de Los Ángeles dijo que persiguió al ladrón y, tras una pelea, logró recuperar el cable de carga y otro cargador que llevaba en una mochila, lo que demuestra que no es la primera vez.
Si bien es cierto que no a todos los vehículos enchufables se les puede extraer el cable de carga mientras el propietario no lo desbloque, es más sencillo de lo que parece hacerse con este accesorio que, por otro lado, supone un coste adicional para el dueño del vehículo.