No hay un coche más famoso en el mundo entero. Desde el año de su nacimiento, el 17 de abril de 1964, día en que se inició su comercialización, el Ford Mustang ha sido el vehículo querido y añorado por todos. Ese coche que nació con estrella y que ha sabido mantener su esencia a través de sus seis generaciones.
Y precisamente esa esencia clásica es la que puede portar el Ford Mustang 2018 Pony Package. Se trata de un paquete, disponible únicamente para el Mustang EcoBoost (prueba), en el que el logo del caballo va encerrado en un corral cromado, como ocurría 50 años atrás -también lo pudimos ver en el Ford Mustang 50 Anniversary Edition-.
Pero además de ese toque diferenciador, este paquete incluye llantas de aluminio pulido de 19 pulgadas, marco cromado en las ventanillas laterales -solo en la versión coupé- y embellecedor entre los pilotos traseros también con el clásico caballo salvaje. Eso en el exterior, porque en el interior solo equipa unas alfombrillas premium con el animal bordado.
Cabe recordar que el Ford Mustang 2017 está disponible únicamente con dos motorizaciones, puesto que el V6 -motor con el que hicimos un road trip por Miami– del Mustang 2015 ha desaparecido con el restyling. El de acceso es el 2.3 EcoBoost de cuatro cilindros en línea y turbo, capaz de rendir 317 CV, y el más potente, el GT 5.0 V8 de 421 CV. Además, estrena la caja de cambios automática de 10 velocidades creada junto a GM.
Junto al Pony Package también estarán el Performance, también para el Ecoboost, y el Mustang Bullitt S550.